URBNSURF Melbourne es una de las primeras piscinas -o lagunas- de olas artificiales de nueva generación. Fue toda una revolución en el mundo del surf cuando se estrenó entre finales de 2019 e inicios del 2020, ya que cuenta con la tecnología vasca Wavegarden Cove, que produce hasta 1.000 olas por hora de todo tipo (para expertos, intermedio o principiantes). 

Lo cierto es que ni en esta ni en ninguna otra de las piscinas de olas artificiales que están proliferando en el mundo del surf, en estos últimos años de eclosión, ha habido ningún accidente grave. Pero alguno tenía que ser el primer y, por desgracia para ellos, les ha tocado en Australia.

Según explican desde 7News, el viernes por la mañana varios surfistas sacaron del agua a un compañero de unos 40 años inconsciente. Le practicaron la Reanimación Cardiopulmonar en la orilla y esperaron a que llegaran los servicios de emergencia, que se lo llevaron al Royal Melbourne Hospital, donde pasó la primera noche en estado crítico.

Desde URBNSURF no han dado más detalles del accidente de forma oficial. Simplemente se han limitado a decir en un comunicado que "nuestros pensamientos están con el surfista, su familia y sus amigos. Nuestro equipo ha dado todo el apoyo y cuidado necesarios al visitante y a sus amigos. Nuestra prioridad es la salud y seguridad de nuetros cilientes. Por respeto a ellos, las instalaciones permanecerán cerradas por el momento". Todo ello antes de abrir de nuevo el domingo, cuando 7News Australia informó también de que la víctima seguía en el hospital pero ya estable.

Desde la propia 7News sí que citan a URBNSURF dando algún detalle más: "El surfista se desmayó mientras remaba y no se golpeó contra la pared", como sí habían dicho previamente algunas fuentes al medio australiano. En cualquier caso, alegando que el accidente está bajo investigación policial, no dirán nada más al respecto hasta tener las conclusiones claras.

Prohiben el leash en un surf park

Aunque de otro estilo muy diferente, el parque acuático que hay en el río en Bend (Oregon, Estados Unidos) ya ha concluido su investigación sobre el accidente que mató a un surfista en sus instalaciones hace unas semanas. Al parecer, el leash (o invento), el artilugio que ata la pierna a la tabla de surf para no perderla, se enganchó en las rocas bajo el agua y eso ahogó al surfista, que pasó hasta 6 minutos sumergido antes de que otros surfistas y amigos le devolvieran a la superficie. Así, han decidido, de momento, prohibir el uso del leash en su ola.