Después de ver el skatepark privado que tiene la skater más popular del mundo, Leticia Bufoni, o el paraíso de los deportes extremos que ha levantado Travis Pastrana en unos terrenos que compró cuando tenía 15 años, ahora es el turno de la campeona del mundo de MTB, Kate Courtney, de revelar los secretos de su entrenamiento y preparación.

Para ello, el equipo de Red Bull se desplaza hasta su casa en Mounta Tamalpais, en California (Estados Unidos), donde vive con su prometido Will, y su perro, Monte. Allí, la campeona del mundo y de la Copa del Mundo de MTB XCO tiene su particular gimnasio, trails y set up de recuperación. Entre todas estas zonas emplea de 20 a 25 horas a la semana de entrenamiento.

En concreto, Courtney muestra su gimnasio, en el que afirma que pasa unas 6 horas semanales (en 2020 fueron más por el confinamiento). Allí tiene también una zona para Zwift, una herramienta que llegó a asegurar que no utilizaría nunca pero que ha descubierto que le permite entrenar al sistema nervioso para la competición. Y también realiza yoga con un entrenador personal para mejorar la movilidad.

Tras salir a recorrer el sendero que más les gusta junto a su pareja y el perro, la piloto de MTB se centra también en la importancia de la recuperación. En una entrevista afirma que "creo que la recuperación marca el rendimiento de los deportistas de élite; si siempre vas al 75-90% nunca te recuperas y nunca llegarás al 100%". Así, enseña su bañera de hielo, su sauna e incluso su jacuzzi, todo outdoor. Pero deja clara una cosa: "No hay nada como dormir bien, soy la reina de la siesta".

A sus 25 años, Kate Courtney se muestra dispuesta a seguir ampliando su palmarés y para ello da mucha importancia a todo el entrenamiento. Revela, también, que organiza su preparación en ciclos de dos años y que actualmente se encuentra en el segundo, preparándose para la prueba de Mountain Bike de los Juegos Olímpicos de Tokio.

Para acabar, explica que también trabaja a nivel mental. "Llevo trabajando con un psicólogo desde hace 5 años, es una parte muy importante de mis éxitos, pero también de la salud", confiesa. Y más allá del entrenamiento, explica que ha estudiado Human Biology en la Universidad de Stanford y reconoce que su primer recuerdo en el mundo del MTB es yendo en tandem con su padre, bajo la lluvia, sin nadie más en la montaña y comprando pancakes para terminar un día de ensueño.