La irrupción del freeride entres los jóvenes esquiadores en España es un hecho. En su mayoría son aficionados que cansados del esquí tradicional quieren probar sensaciones nuevas, que tienen acceso a circuitos como el de Baqueira, perfectos para la práctica de esta modalidad y que entre sus referentes están nombres como el de Aymar Navarro, considerado uno de los mejores esquiadores -fuera pistas- del mundo.

Abel Moga comenzó en esto del freeride a los 11 años, bajo la supervisión de Cristian Boiria. 8 años después y tras los resultados en las dos últimas temporadas en el circuito Junior (Freeride Junior Tour), el joven aranés ya suena en todas las listas como promesa de este deporte. En 2018 y 2019 Moga consiguió muy buenos resultados: obtuvo un 3º puesto en el Freeride Junior World Championship en el Mundial Juniors de Kappl, Austria (2018); el año pasado quedó 2º en la general del FJT de Europa y en 2020 ha subido de categoría y será su primera temporada en el Freeride World Qualifier (FWQ), el paso previo para poder llegar al FWT.

De la escuela Emotion a ir por libre

Los inicios de Moga en la modalidad de freeride fueron en la escuela de esquí Emotion, a través de su antiguo entrenador Cristian Boiria. “Fue él quien me enseñó los valores del freeride y casi todo lo que sé de este deporte. Los entrenamientos con él eran muy libres, nadie había entrenado antes esta modalidad del esquí, así que Cristian iba improvisando y viendo qué era lo mejor para cada esquiador”.

Ahora, ya desvinculado del equipo de Boiria, Abel afronta su primera temporada en el qualifier del Freeride World Tour. Sin embargo, confiesa que nunca pensó que llegaría tan lejos en este deporte: “Empecé con 14 años a competir, iba a alguna competición en Suiza o en los Alpes franceses y poco a poco fui creciendo deportivamente y comencé a ganar circuitos. Ahora hago lo que más me gusta que es esquiar, lo disfruto y estoy muy contento, la verdad”.

Moga reconoce que los últimos años han sido muy importantes para él deportivamente y también a nivel personal, ya que “he conocido a un montón de gente, me conozco mejor a mí mismo, he aprendido a controlar mis nervios antes de una competición o a saber dónde está mi límite con los esquíes, algo fundamental en el freeride”.

Objetivos 2020

Este año no se ha propuesto grandes objetivos. “Principalmente quería encontrarme cómodo esquiando en esta nueva categoría, conocer cómo era la competición o el nivel de los riders”, afirma. Además, 2020 no está siendo una buena temporada de nieve, lo que le está impidiendo entrenar y competir al nivel que le gustaría: “Hemos hecho solo 4 competiciones y una finalmente nos la cancelaron. Así que, en ese sentido, los objetivos no los estoy pudiendo cumplir”.

Su intención en el Qualifier es simplemente poder conseguir los máximos puntos posibles y aprender, para seguir compitiendo y poder entrar en las competiciones de 4 estrellas. “Este año he ido a una competición 3 estrellas donde me caí, desafortunadamente. Luego, he ido a dos de 2 estrellas que quedé primero y segundo, y la de 4 estrellas en Les Arcs (Francia) finalmente se suspendió y no pude sumar puntos, así que estamos pendientes de cómo evoluciona la temporada”, afirma resignado.

El salto de categoría también implica un nivel de esquí mayor entre los riders. El esquiador catalán se ha reencontrado con compañeros con lo que competía hace dos o tres años, llamándole la atención su evolución y los resultados que están logrado: “Hugo Hoff está dentro del top ten y Tom Gratadour también, con ellos competía hace unos años. Por supuesto, me he encontrado con riders que no conocía y que tienen mucho nivel. En la categoría femenina, aunque no estoy tan al día, me sorprende lo ràpido y fluido que está creciendo el nivel entre las chicas”.

Val d’Aran, epicentro del freeride

Abel se ha criado en la Val d’Aran, lugar que parece estar convirtiéndose en un referente del freeride en España, explica que “en el Valle y en Baqueira hay un terreno que no se encuentra en el resto de estaciones de España y eso lo hace perfecto para practicar esta modalidad de esquí. Además, las figuras de Aymar Navarro, Adrià Millan o Txema Trull han popularizado el freeride en la zona y han contribuído notablemente a su desarrollo”.

Pero si hay un nombre que destaca en la actualidad en la zona es el de Aymar Navarro. Imposible no hablar de él si se habla de freeride en España. Abel reconoce que Aymar ha trabajado mucho para llegar donde está y que todo el reconocimiento es merecido: “Aymar tiene un nivel de esquí muy grande, es el mejor y es un orgullo para todos los que nos dedicamos al freeride”.

Los compañeros y las montañas de Abel Moga

La carrera deportiva de Abel ha estado muy unida a la de sus compañeros Axel J. Tukianen, Jordi Riba y Pol Tellosa, todos de la misma zona de los Pirineos. No duda al afirmar que “siempre hemos estado los cuatro, me encanta esquiar con ellos, cada uno tiene su estilo en el terreno y una forma distinta de esquiar. Entre nosotros nos motivamos y cuando subimos juntos a esquiar acabamos siempre haciendo cosas súper guapas”.

Cuando le preguntamos a Abel por sus lugares favoritos para practicar freeride, lo tiene claro: le gusta el Bassibe, la montaña que tiene cerca de casa, “un lugar con muchas posibilidades y que reúne las condiciones perfectas”; Verbier, una estación súper freerider, todo freeski, que “ofrece opciones por todas partes”; La Clusaz, más freeski que freeride, “pero me gusta mucho el terreno, allí se hicieron los vídeos del mítico Candide Thovex y estás allí y ¡madre mía!”.

Por otra parte, asegura que tiene muchas ganas de ir a Canadá, a la Columbia Británica y a Alaska “para tener la sensación de enterrarme en polvo, algo que aquí en los Pirineos nunca he podido. Allí tienen cantidad de nieve y se pueden hacer grandes barbaridades”.

Estilo y referentes

El estilo del freerider aranés combina un poco de todo: saltos, rapidez y trucos. “Me gusta saltar grande, esquiar rápido, poder hacer un 360 o un front flip o grapar en el aire. Me gusta hacer bajadas súper completas, es lo que más puntos te da y visualmente se ve increíble. Me gusta mucho poder combinar el freestyle y el freeride en una bajada de alta montaña”.

Con esa forma de esquiar, es normal que entre los riders favoritos de Abel Moga estén Markus Eder o Kristofer Turdell. “Eder es un esquiador súper sólido, puede meter trucos y freestyle a una bajada de freeride y eso a mí es lo que más me gusta. Puede hacer una línea fluida con saltos y mucho control y ponerle el plus de incluir un 360, un backflip o un rodeo. Yo eso es lo que quiero hacer y es como quiero esquiar, por eso me encantan los estilos del sueco y del italiano. Turdell es capaz de hacer un backflip casi donde quiere”.