Zaragoza ha sido una ciudad que a pesar de tener escena y buenos spots para patinar, no había disfrutado de un skatepark en condiciones. Fue así hasta que el Ayuntamiento, en 2017, completó una reforma de 150.000 euros al skatepark de Vía Hispanidad. Allí construyeron un bowl, obra del arquitecto -y skater- Daniel Yábar que ponía fin a años de reclamaciones y que ha ayudado a hacer crecer estos deportes en la ciudad maña. 

Pero la capital de Aragón podría volver a la situación de hace tres años y quedarse sin un gran skatepark. El motivo es la posible recalificación del terreno para la construcción de viviendas, que ayudaría a financiar la reforma del estadio de fútbol de La Romareda.

La propueta del alcalde de Zaragoza, Jorge Azcón, no ha sentado bien al colectivo skater, que a través de la Asociación ZGZ Skateboarding Club ha expresado su malestar tanto en redes como a El Periódico de Aragón, donde afirman que "llevábamos desde los años 90 luchando por un skatepark y ahora no vamos a permitir que se lo carguen".

De momento han convocado una rueda de prensa para este sábado 29 de febrero y han pedido una reunión con la concejala de Deportes, Cristina García; y el de Urbanismo, Víctor Serrano. Pedirán explicaciones y decidirán qué medidas tomar ante lo que ellos llaman "una macarrada".