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Kitesurf

Seis países en dos meses: la experiencia viajera de Rita Arnaus con su tabla y su cometa

Lograr convertir tu trabajo en tu estilo de vida no es tarea fácil. Rita Arnaus ha conseguido viajar por todo el mundo gracias a su habilidad con el kitesurf...

Rita Arnaus se ha pasado los dos últimos meses viajando por hasta 6 países distintos (además de España).
Instagram

Es evidente que una de las ventajas más relevantes en la practica de cualquier deporte extremo es la infinita variedad de rincones que hay por explorar alrededor del mundo. Tantos que es imposible abarcar todas las esquinas del planeta en una sola vida. No obstante, es algo que se puede intentar. Y si no que se lo digan a Rita Arnaus, que en cuestión de dos meses ha conseguido visitar las costas de lugares tan asombrosos y dispares como Argentina, Venezuela, Antigua, Miami, México o San Vicente y las Granadinas encima de su inseparable tabla de kitesurf e impulsada por su cometa.

La “ajetreada” agenda de esta kitesurfer la he llevado a gozar de un estilo de vida de lo más envidiable. Las gentes, los rincones y las experiencias vividas por el camino son, para Rita, el verdadero premio resultante del esfuerzo, la dedicación y el duro trabajo detrás de su habilidad encima de la tabla. Y por si eso fuera poco, para culminar su experiencia de dos meses eligió como destino final la Spain Kiteboarding League en Isla Canela, el circuito nacional de kitesurf en España. ¡De locos!

Y qué experiencia. Un viaje que le ha traído momentos tan intensos como nadar con tortugas salvajes en San Vicente y las Granadinas, organizar colectas de basura por la costa de Los Roques en Venezuela, disfrutar del ambiente del Kitefest en Cuesta del Viento, Argentina o simplemente surfear por las cristalinas aguas de las costas de Antigua y México, entre otras. Seis rincones paradisíacos y un sinfín de experiencias para celebrar la belleza del kitesurf en plena naturaleza. Aquí va un resumen de ello gracias a su Instagram, donde Rita Arnaus lo documenta todo:

Un gran viaje para seguir creciendo, tanto como deportista como persona. La mejor recompensa después de tantas horas de dedicación. Una rutina de lo más “estresante” en trabajo que muchos quisiéramos tener. Algo que se ha aganado a pulso después de tantos años de dedicación encima de la tabla. ¡Enhorabuena!