El Pico Jano, Collado Fancuaya y Les Praeres marcan la semana en La Vuelta
La cima cántabra y las dos jornadas en Asturias marcan una semana en la que también se vivirá la dura etapa de Bilbao y el paso por San Glorio.
El pelotón de La Vuelta descansa este lunes tras el traslado desde Países Bajos antes de empezar a afrontar desde este martes las primeras etapas de La Vuelta en suelo español en una primera semana que ya pondrá las primeras grandes dificultades para los favoritos a la general con hasta tres finales en alto, dos de ellos inéditos en la ronda española.
Etapa 5: Irún - Bilbao (miércoles 24 de agosto)
La segunda de las jornadas por las que rodará La Vuelta en el País Vasco incluirá un exigente recorrido de 187,2 kilómetros entre Irún y Bilbao. Tras un tramo inicial bordeando la costa de Gipuzkoa y el paso por Donostia, el pelotón entrarán en una sucesión de cotas en las que subirán el Puerto de Gontzagarigana (3ª), las faldas del Balcón de Bizkaia (3ª) y el Alto de Morga (3ª) antes de llegar a Galdakao para entrar en el circuito final al que deberán dos vueltas y que incluye la exigente subida al Alto del Vivero, de segunda categoría con sus 4,6 kilómetros al 8%, que los ciclistas coronarán en su segundo paso (que repartirá segundos de bonificación) a tan solo 14 kilómetros de meta y que podría romper la carrera.
Etapa 6: Bilbao - Pico Jano (jueves 25 de agosto)
La primera gran etapa de La Vuelta consistirá en una jornada de 181,2 kilómetros entre Bilbao y la subida final al Pico Jano, en Cantabria. Un inicio con varios repechos dará paso a la primera subida del día, el Puerto de Alisas (2ª categoría), donde previsiblemente se forme la fuga. Ya en territorio de Cantabria, los corredores rodarán por un tramo llano antes de acercarse a los terribles 40 kilómetros finales que comenzarán con la subida a la Collada de Brenes, puerto de primera categoría con sus 6,8 kilómetros al 8,2% y rampas de hasta el 15%, que repartirá segundos de bonificación en su cima y que podría romper la carrera antes de su rápido descenso para empezar la subida final a una de las cimas inéditas de esta Vuelta: el Pico Jano, puerto de primera categoría con sus 12,6 kilómetros al 6,5% y rampas máximas del 12% que albergarán la primera gran batalla entre los favoritos de la general.
Etapa 8: Pola de Laviana - Collado Fancuaya (sábado 27 de agosto)
Tras una jornada de ‘transición’ camino de Cistierna en la que se subirá el largo Puerto de San Glorio (viernes 26), el pelotón llega a Asturias y lo hace con una exigente etapa entre Pola de Laviana y la subida final al Collado Fancuaya en la que se ascenderán hasta seis puertos puntuables en 153,4 kilómetros. De salida los corredores ascenderán el Alto de la Colladona (2ª categoría) antes de afrontar un tramo favorable previo a las ascensiones al Alto de la Mozqueta (2ª) y al Alto de San Emiliano (3ª). Un tramo de 20 kilómetros llanos llevarán a los ciclistas a la subida al Puerto de Tenebreo (3ª), que repartirá segundos de bonificación en su sima) y poco después al Puerto de Perlavia (3ª) antes de poner rumbo a Grado, donde la carretera empezará a picar hacia arriba antes de empezar la subida final a otra cima inédita de La Vuelta: el Collado Fancuaya, de primera categoría con sus 10,1 kilómetros al 8,5% y rampas de hasta el 19% además de una rampa al 17% en el último kilómetro que podría hacer diferencias.
Etapa 9: Villaviciosa - Les Praeres (domingo 28 de agosto)
La primera semana de La Vuelta terminará con una exigente jornada de 171,4 kilómetros entre Villaviciosa y la subida final a Les Praeres. Tras unos primeros kilómetros con varios repechos, la carrera se endurecerá primero con la subida al Alto del Torno (2ª) y, tras varios kilómetros favorables, con la subida al Mirador del Fito, de primera categoría con sus 9 kilómetros al 6% y rampas de hasta el 10%. La rápida y peligrosa bajada del Fito llevará a los ciclistas a la subida al Alto de la Llama (3ª) antes de volver a Villaviciosa para subir a La Campa (3ª), que repartirá segundos de bonificación. Desde aquí rodarán por 20 kilómetros relativamente tranquilos antes de comenzar la exigente subida final a Les Praeres, de primera categoría con sus 3,9 kilómetros al 12,9% con picos del 24% de gran recuerdo para Simon Yates, ganador en esta cima en 2018, año en el que también se llevó la general de La Vuelta.