Valero no pudo seguir la estela del caníbal Schurter
El suizo, segundo en Val di Sole, se adjudica la general por octava vez. El español entra sexto en meta y abrocha una temporada excepcional con un cuarto puesto global.
El incombustible Nino Schurter, que partía primero en la general de la Copa del Mundo, no falló en la última prueba de Val di Sole (Italia) y logró su octava corona. La semana pasada se había proclamado campeón mundial por décima vez. Le bastó ser segundo tras Titouan Caroud (1h:22:02). David Valero, que partía cuarto en la tabla tras el short track del viernes, necesitaba entrar primero y que el suizo de 36 años quedase por debajo del octavo. Pero no sucedió ni una cosa ni la otra. El granadino finalizó sexto (a 1:48 del galo y a 1:13 del helvético) y termina un año excepcional en la cuarta posición de la general.
Carod fue el protagonista desde el inicio, liderando la prueba en un circuito muy roto y seco. Schurter (Scott) se metió en el grupo perseguidor del francés junto a Luca Braidot, Alan Hatherly y Jordan Sarrou y corrió con la calculadora hasta que les dejó tirados y se impulsó como un cohete hacia una victoria que peleó con ahínco hasta el final. El granadino del BH Templo Cafés partía muy atrás, y desde el puesto 20º logró situarse ya sexto a falta de dos vueltas para el final. De menos a más. Pero no fue suficiente.
Valero (33 años) explotó el año pasado con su bronce olímpico en Tokio y esta temporada ratificó que no fue flor de un día. Campeón en la Copa del Mundo de Snowshoe (EE UU), segundo en Andorra y tercero en Mont-St-Anne, vivió su día de gloria en Les Gets la semana pasada colgándose la plata mundial en un mano a mano con Schurter. Hasta el último día, tuvo opciones de conquistar una general de Copa del Mundo que ningún español ha logrado todavía. La peleará la próxima temporada.