Soler: “Lo intenté hasta el final”
El catalán, compañero de Pogacar en el UAE, terminó en cuarta posición en Mende tras estar en la escapada, como Luisle (12º). Enric Mas cae un puesto en la general (10º).
Pese a que se siga resistiendo la victoria española en el Tour (van 84 etapas consecutivas), los españoles presentes en la carrera, nueve, se están dejando ver en las fugas. Castroviejo, Verona, Luis León (en repetidas ocasiones), Soler… lo están intentando, con Mas siendo el primero de los nacionales en la general (10º). En el caso de Soler, que está al servicio de Pogacar, esta vez tuvo la libertad para buscar algo bonito por delante, una vez tranquilizada la etapa que empezó de manera frenética con movimiento de su líder, Pogacar, contra el amarillo. “Pude estar con ellos y lo intenté hasta el final. Ataqué de lejos en un día muy caluroso. Estoy muy cansado”, dijo en Mende.
El del UAE protagonizó una de las imágenes llamativas de la jornada, comiéndose un helado en la escapada. “Estaba deshecho por el calor. La suerte de ir en fuga es que tienes el coche más cerca para poder coger agua”, añade. El otro español fugado, Luis León, repitió escapada tras ser tercero esta misma semana. Y eso que no estaba al 100%: “No pasé buena noche, dormí mal. Me dolía la cabeza, el calor…”, lamentaba el murciano, que finalmente fue 12º, y no se rendirá en la lucha por su quinta etapa en el Tour a sus 38 años (la última fue en 2012): “Aquí las victorias están muy caras. Ves a gente que antes disputaban clasificaciones generales y que ahora están en el Tour a por etapas, y aun así les cuesta. Seguiremos intentándolo hasta París”.
Enric Mas, que entró 26 segundos después de Vingegaard y Pogacar, ahora es 10º en la general. Cae un puesto respecto a Meintjes, que estuvo en la escapada. “Creo que poco a poco, después del mal día en Galibier y Granon, se va confirmando que vamos bastante mejor”, cuenta mientras mira sus datos en el Garmin. “Vamos a pasar mañana y, después del descanso, tendremos ya los Pirineos, con una primera etapa abajo y esos dos finales en alto de miércoles y jueves, que serán jornadas muy duras.”, dice. Y sobre sus objetivos, destaca que “puede pasar de todo”: “Puede haber explosiones, así que esperemos que no nos suceda a nosotros, que haya más de una y salgamos beneficiados”.