Nadie se ha querido perder el inicio del Tour en Bilbao
Muchos rostros conocidos y un gentío incalculable se acercó a la explanada de San Mamés y su entorno para el pistoletazo de salida.
Mira que Bilbao ha organizado grandes acontecimientos en los últimos tiempos. El Mundial 82 y los festejos por los títulos con la Gabarra quedan marcados a fuego en la memoria de los veteranos. Si nos detenemos en la era moderna, han llegado el Red Bull Cliff Diving,el Mundial de baloncesto con el Dream Team de Estados Unidos en el BEC, los The World’s 50 best restaurants, los Premios MTV, un amistoso de los Sixers, las finales europeas de rugby... sólo se escapó la Eurocopa por culpa de la pandemia. Pues bien, nada se puede igualar, ni lo más mínimo, con la dimensión del Tour. Un reguero interminable de aficionados se ha dado cita esta mañana en San Mamés desde primera hora para vivir algo único: el Grand Départ de la ronda gala. Todos querían tocar o ver de cerca a los 176 corredores inscritos. Caminar en medio kilómetro a la redonda a partir de ese punto central del arranque de la primera etapa se hacía materialmente imposible.
El ‘Village’, punto de encuentro de patrocinadores, periodistas e invitados, contribuía a una mística de evento de masas con el que todo el mundo está encantado y que a los responsables de que Bilbao y Euskadi vivieran un a jornada así tenía más que satisfechos. En un día encapotado pero con una temperatura excelente de 20 grados, Tadej Pogacar (un ídolo en Bilbao tras sus ánimos al Athletic en la puesta de largo del jueves), Mikel Landa, Jonas Vingegaard, Ion Izagirre y Peter Sagan han sido los más aclamados por el gentío, que se ha tomado la presentación como lo que es, un acontecimiento único. “¿Cómo se puede ir a Pike Bidea desde aquí caminando?”, era la pregunta más empleada por muchos seguidores, desconocedores de que desde el centro de la ciudad hasta uno de los puntos calientes de la jornada es una aventura en la que hay que invertir bastante más de una hora y por senderos finales zigzagueantes y muy empinados.
Cientos de ikurriñas, junto a banderas de decenas de países, han puesto color a una mañana que ha transcurrido sin incidentes y en la que los aficionados también han podido ver la interminable caravana publicitaria. Infinidad de rostros conocidos se han agolpado en el pistoletazo de salida de la 110 edición de la Grande Boucle. Siete han sido los encargados de cortar la cinta protocolaria para inaugurar la salida neutralizada a las 12:30 tras una emocionante cuenta atrás, rodeada de expectación: el director del Tour de Francia, Christian Prudhomme; el lehendakari, Iñigo Urkullu; el alcalde de Bilbao, Juan Mari Aburto; el presidente de la UCI, David Lappartient; la diputada general de Bizkaia, Elixabete Etxanobe; el portavoz y consejero de Cultura y Política Lingüística del Gobierno vasco, Bingen Zupiria; y Joane Somarriba, la ciclista vasca más laureada. Tras ellos se han situado en animada conversación Vingegaard y Pogacar, que se reparten los tres últimos maillots amarillos de ganador, y algo más atrás, una fila con los corredores vascos. “Siempre decimos que Bilbao es la capital del mundo y eso hoy se convierte en realidad”, se despachó el alcalde.
La esfera de la política estuvo representaba en su mayor parte por representantes del PNV, como Andoni Ortuzar, Aitor Esteban, Pedro Aspiazu, Denis Itxaso, Ainara Basurko y Josu Ercoreca. Jon Uriarte, el presidente del Athletic, ha acudido junto al directivo Xabi Álvarez. Ha habido otros dirigentes rojiblancos de la anterior directiva, como Mikel y Joana Martínez, además de Jon Ander de las Fuentes. Los exciclistas Samuel Sánchez, Purito Rodríguez, Alberto Contador y todo un ganador del Tour como Óscar Pereiro, que ha realizado algunas entrevistas, no se han perdido detalle. Lo mismo ha pasado con los exleones ahora entrenadores Aitor Larrazabal, Cuco Ziganda y Patxi Salinas. El director de la Vuelta, Javier Guillén, suele ser un asiduo a este tipo de citas. Eneko Atxa, prestigioso cocinero ‘triestrellado’ ha paseado todo su glamur,. Es quien ha diseñado sel pincho e la carrera: la TOURtilla de bacalao.
El lehendakari, Iñigo Urkullu, aseguró que la salida del Tour “es un sueño que se convierte en realidad”. “Se dice de manera tópica pero es así. Hemos peleado desde hace muchos años porque la salida del Tour estuviera aquí, en Euskadi, particularmente en Bilbao. Se ha conseguido que estuviera aquí y es un espectáculo inigualable”, ha apuntado el lehendakari. A éste, además, le embarga un “sentimiento de orgullo por la capacidad de organización de una gran salida del Tour, por proyectar al mundo como realmente somos, como no debíamos haber sido proyectados en el pasado desgraciadamente”. “Sin embargo, en esta ocasión -continuó- creo que el mundo puede comprobar perfectamente qué es Euskadi, un pueblo que también sabe proyectarse internacionalmente desde lo que es el deporte, un deporte que como el ciclismo está tan arraigado en Euskadi”.
Urkullu recordó que “para llegar al día de hoy han sido dos años de trabajo intenso” y por ello ha querido “empezar por reconocer la labor que han desarrollado todos los que han estado implicados en la organización para que el día de hoy fuera posible”. Ha extendido la felicitación a “los miles de voluntarios que han dado su nombre para prestar su ayuda en lo que es el transcurrir del Tour en estos tres días en Euskadi”. Al lehendakari le ha supuesto “una satisfacción enorme haber podido dar la salida” al Tour de Francia “con todas las garantías” y mostró su deseo de que “ojalá se diera la circunstancia de que ganara un ciclista vasco” en la primera etapa, la de este sábado con salida y llegada en Bilbao.
Y más políticos: el presidente del Senado, Ander Gil; Esther Martínez y Bea Fanjul del PP; Eneritz de Madariaga de Elkarrekin Podemos; así como muchísimos concejales del Ayuntamiento de Bilbao, con especial mención para Xabier Otxandiano, del Área de Desarrollo Económico, Comercio y Empleo, uno de los más activos para acercar el Tour a la ciudad del Guggenheim. El cabeza de lista al Congreso por Bizkaia de EH Bildu, Oskar Matute, ha animado a los ciudadanos vascos a aprovechar “el escaparate” del Tour para “demostrar al mundo que Euskal Herria vive con pasión el ciclismo y reivindica con la misma fuerza y determinación que queremos ser un país que decide su futuro libre y democráticamente”. El preámbulo a una etapa que va a ser una fiesta ha sido una montaña rusa de sensaciones. “Esto se puede vivir un día, repetirlo muchas veces me resultaría imposible, va a ser la jornada más intensa de mi carrera”, lanzaba exhausto y lleno de excitación ante tanto cariño Pello Bilbao.
Los asistentes han presenciado el corte de la cinta a través de las pantallas gigantes instaladas en la explanada de San Mamés y del momento en el que el lehendakari ha pulsado el botón que daba inicio a la etapa. Tras el aurresku de honor, la cuenta atrás y los aplausos del público, el pelotón ha circulado por el centro de la capital vizcaína en un recorrido neutralizado que ha transitado por las calles Sabino Arana y Abandoibarra hasta llegar a alameda de Mazarredo. Desde allí, el pelotón se ha dirigido por Alameda Rekalde hasta Moyúa para dirigirse hacia el puente del Arenal. Tras pasar por el Campo Volantín, los ciclistas se han dirigido por avenida del Lehendakari Agirre hasta Enekuri, donde los ciclistas han dado inicio a una etapa de 182 kilómetros que está previsto concluya sobre las 17:15 horas en el Parque Etxebarria, donde los ciclistas llegarán tras pasar por la avenida de Zumalakarregi. La marea naranja, que identifica al Euskatel Euskadi, compitió con el amarillo del Tour durante todo el día.
Miles de personas se han volcado al paso de la caravana ciclista a lo largo de los 182 kilómetros de la jornada, culminada con el triunfo de Adam Yates. Un total de 54 motoristas de la Ertzaintza, en coordinación con los motoristas de la Garde Républicaine de France, han llevado a cabo las labores de acompañamiento de los ciclistas, mientras que entre 1.500 y 1.700 ertzainas han tomado parte en el dispositivo de seguridad. La caravana publicitaria de la ronda francesa ha sido, como es tradicional, la encargada de abrir la prueba antes del paso de los ciclistas por alrededor de 40 localidades vizcaínas: Arratzu, Asua, Bakio, Barrika, Berango, Bermeo, Busturia, Derio, Erandio, Ereño, Forua, Galdakao, Gatika, Gautegiz-Arteaga, Gernika-Lumo, Getxo, Gorliz, Ibarrangelu, Kortezubi, Larrabetzu, Laukiz, Leioa, Lemoiz, Lezama, Loiu, Morga, Mundaka, Murueta, Muxika, Nabarniz, Plentzia, Sondika, Sopela, Sukarrieta, Urduliz y Zamudio. En todas ellas, miles y miles de aficionados han alentado a los deportistas. La presencia de público se ha vuelto multitudinaria en la ascensión a Pike bidea, punto de unión de Sondika con Artxanda, y donde las camisetas naranjas monopolizaban el paisaje después de que numerosos aficionados hayan pasado noche. El pelotón ha llegado poco antes de las 17:15 horas al Campo Volantín, donde, tras pasar por el Ayuntamiento, los ciclistas han encarado la subida al parque de Etxebarria, lugar en el que estaba instalada la meta. Mañana toman el relevo Vitoria y Donostia.
Seguridad desde tres mesas de trabajo
El Gobierno vasco ha constituido este sábado tres mesas de trabajo para la coordinación y seguimiento de la seguridad del Tour de Francia 2023, que ha comenzado hoy en Bilbao y cuyas tres primeras etapas discurrirán por Euskadi. En el “macrodispositivo” de seguridad montado, la Ertzaintza ha determinado 2.190 puntos de corte en las carreteras vascas para garantizar la seguridad de la prueba y ha establecido en el recorrido 166 puntos por los que los equipos profesionales podrán acceder de manera urgente y en condiciones de seguridad en caso de emergencia.
Según ha informado el Departamento de Seguridad vasco, a las 8 de la mañana de este sábado se ha constituido en la sede central de la Ertzaintza de Erandio (Bizkaia) una Mesa de Coordinación Policial encabezada por la directora y el jefe de la Ertzaintza, Victoria Landa y Josu Bujanda, respectivamente.
En esta mesa, que supervisa todos los aspectos del operativo de seguridad y movilidad, se han integrado también mandos policiales de todas las unidades de la Ertzaintza, Policía Nacional Francesa y Gendarmerie. Al mismo tiempo, la directora de Tráfico del Gobierno Vasco, Sonia Díaz de Corcuera, y el director de Atención de Emergencias y Meteorología, Ricardo Ituarte, han convocado una Mesa de Coordinación de Tráfico y Emergencias en Bilbao para reunir a representantes de las instituciones y entidades vascas que intervendrán en caso de ocurrir una emergencia o incidencia de tráfico.
A las 9.30 horas, también en Bilbao, el vicelehendakari primero y consejero de Seguridad, Josu Erkoreka, ha reunido a los cargos representados en la Mesa de Seguimiento de la Seguridad del Tour de Francia: Viceconsejería de Seguridad y direcciones de Ertzaintza, Atención de Emergencias y Meteorología, Tráfico, Coordinación Policial, Gabinete y Comunicación.
Seguridad ha recordado que las instituciones han diseñado para las tres etapas del Tour en las carreteras vascas un Plan Director de Seguridad “integral” y “sin precedentes en Euskadi”, ya que en este fin de semana coincide el inicio de la carrera francesa con la operación salida del tráfico de verano y la Operación Paso del Estrecho. En este dispositivo están integradas todas las entidades vascas involucradas en la seguridad pública del país: Ertzaintza, policías locales de todos los ayuntamientos por los que discurre las tres etapas del Tour, 112 SOS Deiak, servicios de emergencias y extinción de incendios de las tres capitales y las tres diputaciones forales, Osakidetza, y equipos de control de carreteras y tráfico de todos los niveles institucionales.
Las diferentes mesas de coordinación reciben imágenes en tiempo real y están en constante comunicación con Centro de Coordinación del Tour de Francia, situado en el Bilbao Exhibition Centre de Barakaldo. El lehendakari, Iñigo Urkullu, y el director general del Tour de Francia, Christian Prudhomme, han sido los protagonistas del protocolario corte de cinta que ha precedido a la disputa de la primera etapa del Tour de Francia 2023 -edición número 110-, de 182 kilómetros por carreteras de Bizkaia.