David Ferrer, gladiador en la tierra del Foro Itálico, donde fue finalista en 2010 (cayó ante Rafa Nadal) y semifinalista en dos ocasiones, se desenvuelve estos días sobre otro tipo de arena: la de las dunas del desierto de Marruecos. El ex número tres del mundo, que colgó la raqueta en 2019 con 27 títulos, participa en la Titan Desert, la carrera de mountain bike más dura del mundo. Una competición de 598 kilómetros con 7.000 metros de desnivel a lo largo de seis días.

"Lo más duro está siendo afrontar las dunas, rodar en arena, porque tienes que hacer mucho esfuerzo y son muchas horas con el calor apretando bastante", contó Ferru a Radiogaceta de los Deportes después de la segunda jornada.

El extenista, aficionado al MTB y a la carretera, se dejó "engañar" por sus amigos del equipo Scott-Cala Bandida, entre los que está Sergio Mantecón, uno de los mejores corredores españoles de XCO, ahora centrado en el bike-maratón tras 21 temporadas en distancia olímpica.

"Son muchas horas, pero me lo estoy pasando muy bien. Es un deporte que me encanta y era el momento de hacerlo con amigos", contó Ferrer (40 años), que tras dejar las pistas entrenó a Alexander Zverev y antes de partir a Marruecos ejerció de director del Godó.