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CICLISMO

El gran salto de Sandra Alonso

La joven ciclista alicantina, que para este 2022 se marchó al Ceratizit alemán, fue 10ª en su estreno en la mítica París-Roubaix. "Será ya una carrera fija para mí", explica en AS.

El gran salto de Sandra Alonso
Arne Mill / Ceratizit

Sandra Alonso (23 años) está viviendo su temporada de eclosión en el pelotón femenino. Con grandes actuaciones en categorías inferiores, en este 2022 cambió de aires para fichar por el Ceratizit alemán, y llegó para ser una de sus líderes. La alicantina, que nació en México, "aunque con nueve meses ya estaba viviendo en Torrevieja", está respondiendo a la confianza. En la París-Roubaix, celebrada el pasado sábado, logró terminar décima: el mejor resultado de una española. Una prueba lejos de los moldes de la tradición nacional, en la que tampoco ningún español en la modalidad masculina ha logrado vencer en la historia, pero que desde ahora tendrá a una corredora fija en las próximas ediciones.

"Al principio de temporada vimos con el equipo que era una carrera que se me podía dar bien, porque tengo potencia en el llano. Llegué con miedo, o respeto mejor dicho, pero es necesario para una carrera así", cuenta la alicantina a AS. "Visto lo visto, será una prueba fija para mí, iré con más experiencia y habrá que ver lo que se puede conseguir", añade. En sus inicios, disputó todo tipo de modalidades ciclistas: pista, mountain bike, ciclocross... "Y todo eso te ayuda en carretera, sobre todo a optimizar las fuerzas y a tener una buena colocación en el pelotón", añade.

Sandra Alonso, en su llegada al velódromo de Roubaix en 10ª posición
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Sandra Alonso, en su llegada al velódromo de Roubaix en 10ª posición@sandyAD98

En la Roubaix asombró, porque ni la propia corredora era consciente de cuál era su límite en una carrera de este tipo, de las más duras del calendario. "Sabía que llegaba en buena forma, pero ufff... esto me da más motivación. Además, recibí muchos mensajes de otros ciclistas, como Perico Delgado, y eso ilusiona", resalta. Sandra Alonso compagina el ciclismo con sus estudios de Arquitectura Técnica: "No tiene nada que ver, pero me gusta y me sirve para desconectar".

Se define a sí misma como una corredora todoterreno: "En llano ruedo bien, tengo buena punta de velocidad y la subida podría ser mi asignatura pendiente, pero voy poco a poco mejorando, y actuaciones como Roubaix te impulsan para más". Fuera de su zona de confort, en un equipo alemán ("el ciclismo femenino en España todavía tiene que avanzar más") tiene un gran reto: "La idea es afianzarme en el pelotón con las mejores". El lunes, también fue 10ª en Bélgica: "La próxima que sea más adelante". Un futuro prometedor, también en Roubaix.