"Es el momento del relevo". Esa fue la consigna con la que la Selección española acudió a unos Mundiales de Flandes en los que se va de vacío, sin ningún top-10, un solo top-20 y varias buenas actuaciones aunque le faltó alguna que le hiciera soñar realmente con haber peleado las medalla. La era postValverde no se confirmó con un resultado relevante en un año para el ciclismo español que ya estaba arrojando dudas: sin victorias en las grandes y cuatro triunfos de etapa World Tour, además de no haber mojado en Europeo, Juegos y Mundial. El regreso de Enric Mas a un podio de una grande como La Vuelta, la irrupción en la élite de una generación sub-23 liderada por Carlos Rodríguez, segundo del Tour del Porvenir, y Juan Ayuso, ganador del Giro Sub-23, y chispazos de nombres como Aranburu (triunfo en la Itzulia, séptimo en San Remo..) parecen ser los argumentos más sólidos para mirar con optimismo al futuro.

"Somos una generación joven que estamos con muchas ganas y que está poniendo el 100%", defendió Iván García Cortina tras ser este domingo el más destacado de una Selección mundialista en la que se estrenaron con buenas sensaciones nuevos nombres como Roger Adriá o el propio Carlos Rodríguez, quien logró acabar 53º (sólo terminaron 68 de 195) a pesar de ser el segundo más joven de la carrera con sus 20 años. Cortina, 23º en meta y muy protagonista cuando se desató la batalla, fue de los más destacados de la semana en la competición flamenca en la que también lograron buenas actuaciones la veterana Mavi García, 29ª en la élite femenina tras ir en cabeza en los kilómetros finales, y el junior Iván Romeo, cuyo 20ª posición fue la mejor plaza de un español en los Mundiales.

"Creo en esta generación y si no lo hiciera no los hubiese traído", asegura el seleccionador Pascual Momparler, que es consciente de lo que hay que trabajar, pero está convencido de que hay materia prima. Nombres como Juan Ayuso, que no pudo brillar en Sub-23 tras llegar al Mundial tras un año muy intenso, su compañero Raúl García Pierna (retirado también de esa carrera por problemas físicos) o un Alex Aranburu al que una caída le eliminó de la carrera élite, fueron algunas de las bazas más sólidas sin suerte en la competición. Brotes verdes que no lograron florecer en Flandes.