Taaramäe: "He soñado mucho tiempo con liderar una grande"

Rein Taaramäe explotó de emoción cuando cruzó la meta para convertirse en el ganador del Picón Blanco en su estreno en La Vuelta 2021. El estonio se abrazó a sus asistentes visiblemente emocionado y confirmó luego que los miembros del equipo se encontraban igual: “Estaban como locos dando brincos”. No era para menos, porque para su formación, el Intermarché Wanty, está siendo muy complicado ganar esta temporada. Fue el cuarto triunfo del año, aunque dos en plazas grandes ya que antes de este en La Vuelta también lo logró en el Giro con Taco Van der Hoorn.

Para Taaramäe no es tan raro, ya que se trata de un buen escalador que ya tenía un triunfo de prestigio en La Vuelta, en La Farrapona, aunque hacía 10 años. También otro en el Giro, hace cinco, y un palmarés muy respetable de 19 conquistas, pero lo que provocó esa emoción es que en los últimos cinco años sólo había ganado campeonatos de su país y, a sus 34 años, parecía que su mejor tiempo había pasado. “Hay mucho trabajo detrás de esto y me alegro mucho por mi familia y mi equipo”, declaró. También elogió a sus técnicos: “Me dijeron que llegaba la fuga seguro, que lo tenía que intentar”.

Y es que para este ciclista estonio que despuntó en categorías inferiores (etapa en el Tour del Porvenir 2008 incluida) y que en sus inicios siempre se tuvo la idea de que podía despuntar en las grandes, el conseguir además de la etapa el maillot rojo fue un sueño cumplido: “Era algo que quería. Ya estuve cerca en un Giro de la maglia rosa y soñaba con ser algún día líder de una gran vuelta”. Al fin lo logró, cuando parecía que su carrera ya no le iba a dar más alegrías de este calado: “Es emocionante. Sé que si el Jumbo hubiese querido retenerlo habrían ido a por mí, pero esto es un enorme éxito, etapa y liderato. Es un sueño… y ya no me quedaban muchos años para lograrlo.”