Esta semana se conoció la sanción que deberá cumplir Dylan Groenewegen por causar el terrible accidente de Fabio Jakobsen en el Tour de Polonia. La UCI decidió suspender al neerlandés con 9 meses, por lo que no podrá volver a competir hasta el 7 de mayo de 2021. Pese a ello, tal y como recogió el diario Het Laatste Nieuws el pasado viernes, el conjunto Deceuninck-QuickStep pretende seguir adelante con el proceso legal que mantiene abierto contra Groenewegen por su polémica acción.

"No sabemos cuándo ocurrirá el caso. Como con la mayoría de los asuntos legales, será algo de una perspectiva a largo plazo", explicó Patrick Lefevere, jefe del equipo belga, que tampoco quiso valorar demasiado la sanción a Groenewegen, algo sin precedentes en el ciclismo al margen de casos de dopaje: "Ya no tengo ganas de hablar de eso. No porque tenga miedo de la reacción, sino simplemente porque ha sido suficiente. Como equipo, no tuvimos ninguna influencia [en la sanción] de todos modos. La regla número uno debe ser que el ciclista mantenga las manos en el manillar en todo momento".

En cuanto a Jakobsen, Lefevere dio más detalles sobre su proceso de recuperación y actual estado de salud. "Me sorprendió especialmente su optimismo. Es competitivo, quiere regresar y no tiene miedo. Su mandíbula ahora tiene que sanar durante tres meses antes de que se pueda realizar la implantación y luego se necesitarán otros tres meses para que se le coloquen nuevos dientes. Eso nos llevará a principios de mayo, aunque tal vez pueda correr sin dientes antes de esa fecha. No soy un especialista, pero su respiración y sus cuerdas vocales parecen ir en la dirección correcta. Fabio tiene muchas cicatrices en la cara; ya no será Elvis Presley, pero debe saber de dónde viene", concluyó Lefevere.