La Vuelta 2020 no ha encontrado positivos entre los ciclistas participantes en los primeros 498 test que se realizaron este lunes, pero sí dos entre los staff, concretamente un miembro del personal del Sunweb y otro del Bahrain-McLaren, que será sustituido por otro asistente del equipo. Las dos personas infectadas ya se encuentran aisladas según el protocolo de la carrera y la UCI. Son los resultados de los controles que se han llevado a cabo a la llegada de los ciclistas en un centro de pruebas montado en Irún y por donde fueron desfilando los principales equipos. Aún queda por saber los resultados de los últimos rezagados, la mayoría procedente del Tour de Flandes.

La principal preocupación de la carrera es que la burbuja central, denominada nivel 1, a la que pertenecen los corredores y equipos, se mantenga intacta, por lo que se está limitando al máximo el contacto con el exterior, medios e incluso miembros de la organización. El objetivo de esto test es que cuando comience la carrera este martes el pelotón se encuentre totalmente sano, lo que se irá comprobando en un laboratorio móvil que acompaña a la prueba, y con éxamenes exhaustivos los días de descanso.

 Desde La Vuelta se ha asegurado que posiblemente lleven a cabo el protocolo más estricto que se ha visto ahora en el calendario y conseguir que, como en el Tour, llegar sin positivos de deportistas hasta el final. En el Giro, eso no se logró y conllevó el abandono de dos equipos enteros, el Jumbo-Visma y el Mitchelton-.Scott, presentes en la ronda española.