Tomás Martínez: "La Titan Desert me ha dado lo que necesitaba para seguir viviendo"
El madrileño tomará la salida de su tercera Titan Desert el próximo 2 de noviembre en Almería. Lucha contra un cáncer que le diagnosticaron hace varios años.
Tomás Martínez (Madrid, 52 años) se prepara para disputar su tercera Titan Desert el próximo 2 de noviembre en Almería. Es la primera vez que esta carrera se celebra en territorio europeo, después de hacerlo en Arabia Saudí, Cuba y Marruecos.
Entre los participantes de esta carrera por el desierto, que consta de cinco etapas, está este madrileño. La particularidad de Tomás es que lucha contra un cáncer muy agresivo desde hace varios años, pero en vez de rendirse, acudió a la llamada del deporte. Todo un ejemplo de superación.
- A por tu tercera Titan Desert. Se dice pronto...
- No pensaba que iba a llegar tan lejos después de tener esta enfermedad que me joroba algunos días. Lo he logrado con cabeza y positividad. A veces me fastidia en algunas etapas o entrenamientos, pero luego se pasa.
- ¿Cómo te encuentras?
- Hay días buenos y días malos. De momento mi enfermedad no tiene cura, pero la están parando gracias a un estudio del Hospital Universitario de La Paz que empecé cuatro años. Me aprovecho del cuerpo cuando está bien. Estoy entrenando con rodillo, carretera y los fines de semana hago montaña. La quimio me la darán una semana antes de la Titan y otra después. Algún día me afectará. En una etapa de la Titan, con Valentí Sanjuan de testigo, me atacó en las rodillas por la inflamación y llegaron los calambres. Ahora estoy mejor. Se me ha regenerado el pulmón. Y estoy más experimentado en estos retos. Lo disfruto más.
- Esta vez no tendrás que pedalear en el desierto de Marruecos, pero sí en el de Tabernas.
- Me encanta que se haga una Titan en España. ¡No me la puedo perder! Me tatué en mi gemelo las Titan de 2018 y 2019 y ahora voy a poner Almería. Me gusta que se haga en mi país. Incluso lo cambiaría por Marruecos. No esperaba que la Titan se hiciese en España. Es una oportunidad muy buena.
- La 15ª Titan Desert tiene una etapa menos e inferior kilometraje.
- El que piense que va a ser fácil, se equivoca. La Titan nunca lo pone fácil. Son 7.000 metros de desnivel. ¡Cuidado! No es ninguna broma. Arena, piedras... Será parecido al desierto de Marruecos.
- ¿Qué recuerdas de tus anteriores Titan?
- La primera es inolvidable. Y cuando ves banderas a falta de un kilómetro de la meta lo sueltas todo llorando. La quimio, las pruebas que me han hecho, esperar lo que dicen los médicos... La Titan es soltar todo lo que te pasa durante el año. He hecho otras carreras, pero la Titan es lo que me ha hecho seguir adelante. No me puedo creer cuando adelanto a gente joven que no está enferma. Quiero llegar a las seis Titan y convertirme en Titan Legend.
- ¿Cuál ha sido tu momento más difícil en el desierto?
- Lo que llevo peor es andar por las duras. El impacto lo llevo fatal, pero la cabeza me hace seguir. Estoy haciendo todos estos retos por lo que me ha pasado. Si no, no podría. Me llena y me da mucha vida. Me voy a morir, pero por mis cojones lo hago.
- ¿Has hecho muchos amigos entre la comunidad titán?
- ¡A punta pala! De todas las ciudades de España. Muchos me han llamado para hacerla conmigo. Y el campamento con los titanes es como si estuvieras en otro planeta. Estás desconectado del mundo y no te acuerdas de nada.
- ¿Qué es lo que más te gusta de la prueba?
- No hay nada que no me guste. Me gusta todo. El espíritu de superación, los videos que hacen, la música al despertar que tengo incluso en el móvil, el amanecer en el desierto, los pueblos, los niños a los que les llevo piruletas...
- ¿La Titan te hace sentir más vivo que nunca?
- Es cierto. Me ha dado aquello que necesitaba para seguir viviendo. Me da vida. Quien me lo iba a decir cuando me diagnosticaron metástasis. La Titan me anima a seguir luchando y superándome. Cada día me levanto y disfruto más la vida que otras personas que no tienen cáncer. Busco que la gente visualice mi enfermedad y lo que hago. Ellos también pueden hacerlo. Los estudios clínicos dicen que el deporte es fundamental. Mover la sangre y tener algo positivo en la cabeza ayuda a mejorar.
- Desde esta perspectiva diferente que te ha otorgado la vida, ¿cómo estás viviendo la pandemia que nos ha tocado vivir?
- Aunque soy de riesgo, no le tengo miedo. Esto está cambiando a la gente. Vamos todos deprisa, como si no tuviéramos vida. Y es como si desde arriba nos hubieran dicho: "Ahora sabréis lo que es la vida". Y la gente se da cuenta de lo necesaria que es la investigación, aunque se ha dejado apartado un poco la investigación del cáncer. Nadie está a salvo.