Un triatleta belga sube el Tourmalet... ¡en pelota hinchable!

Habitualmente, la figura del Tourmalet va asociada al Tour de Francia y, especialmente, a una bicicleta. Pero el elemento protagonista de este historia no tiene dos ruedas, aunque bota y también va relleno de aire...

Se trata de la hazaña que llevó a cabo el triatleta belga Valentin Glenn (29 años), nacido en la localidad de Ypres, en el coloso pirenaico, ya que subido a una pelota hinchable, conocida como fitball y habitual en los gimnasios, completó los 18,6 km que componen la ascensión al Tourmalet. "Soy un gran soñador, así que parece una iniciativa apropiada para apoyar. Espero echarles una mano con este truco y también motivarme para hacer algunos más como este. Tengo una nueva aventura planeada para agosto, de hecho", explicó el triatleta en The Bulletin, cuya iniciativa pretendía recaudar dinero para Les Petits Princes, una organización con sede en París que cumple los deseos de los niños críticamente enfermos.

La gesta fue todavía más épica si tenemos en cuenta el clima, ya que en las últimas horas del reto aparecieron el frío y la lluvia. "Eso fue realmente difícil, y necesité dos horas para hacerlo", dijo Valentin sobre los dos últimos kilómetros de ascensión. Y añadió: "Además de eso, el clima era realmente horrible, frío y brumoso. Tenía un dolor enorme en los glúteos y los isquiotibiales, y también me dolía el cuello, las muñecas y el codo. Pero la forma en que me sentí cuando llegué a la cima hizo que valiera la pena. Estoy muy contento de haberlo hecho". Una de esas historias que merece la pena contar.