Carapaz: "Falta un día, pero será para gozar del resultado"

Tiene el Giro en su mano.

Sí, gracias al trabajo espectacular de todos en el Movistar. Poder ganar de esta manera es un sueño hecho realidad. Estoy contentísimo de que corredores que son mis amigos me llevaran hasta lo más alto. Nos falta una jornada, pero será para gozar del resultado.

¿Cómo se siente?

Ahora mismo no puedo explicarlo. Se trata de una situación única. Mi mujer y mis dos hijos vinieron desde Ecuador para vivir juntos este sentimiento, y sólo nos queda una fracción por delante. Me encuentro emocionado y contento por todo lo que los chicos hicieron por mí.

(Tania, su esposa, y Richard Santiago y Aimy Sofía, sus niños, le acompañaron en el rodillo y antes de la ceremonia de premiación).

Explique la estrategia del Movistar en las dos últimas ascensiones.

En la subida a Croce d’Aune se produjo una gran selección. Estábamos Mikel y yo, y pensamos en buscar la etapa para él y, por qué no, también pelear el podio. En la ascensión final tiré con la intención de ampliar diferencias con Roglic tanto para él como para mí, para afrontar con más seguridad la crono de Verona. Nos entendimos bien con Nibali y agradezco su felicitación, le considero un grandísimo campeón y un rival encomiable.

¿Cuáles fueron los momentos más complicados?

Difícil, quizá la pérdida de tiempo inesperada en Orbetello por culpa de una avería. Sin embargo, sabía a lo que me enfrentaba, ya que estudié el trazado antes y durante el Giro. Aunque fue un examen diario, conocía el terreno y sufrí para alcanzar la camiseta rosa.