Schachmann logra el triplete y es candidato a ganar la txapela
Jornada infernal con lluvia y granizo, de nuevo con caídas y resolución al sprint entre cuatro ciclistas. A partir de mañana, con Arrate y Eibar, todo cambiará en la Vuelta al País Vasco.
La etapa de Vitoria a Arrigorriaga (con el txuri-.urdin Illarramendi como espectador de lujo en la llegada) realizó una elección con un manto de agua. antes decidió no salir Alaphilippe, por las heridas de guerra del día anterior, y se fue para Bélgica. Se decantó por eliminación. La jornada fue infernal, con lluvia, granizo, frío y de nuevo varias caídas. Una de ellas tachó a Pello Bilbao, una opción local. La fuga buena parecía formada con nombres notables como Verona, Williams, Monfort, Grmay, De Marchi, Storer e Iturria. En la subida a Bikotz Gane fue cayendo gota a gota parte de ese racimo, empezando por Storer e Iturria. De Marchi y Verona, dos acreditados ciclistas, tensaron la cadena. Por detrás se iba organizando la caza, con Movistar muy atento y el Mitchelton afilando el grupo. Edet saltaba y hacía de puente pero le neutralizan pronto. El colombiano Betancur también dio un arreón importante. Tras el sprint de Orozco, trataron de buscar la épica Albasini y Carthy, por delante de un grupo de algo más de medio centenar de unidades, pero pronto arrojaron la toalla.
El asfalto estaba muy cargado de agua y quedaban dos descensos peligrosos, de Zaratamo a meta y, este más desconocido, un escalón de unos 700 metros en la subida a este municipio vizcaíno cuna de buenos pelotaris. A 13 kilómetros para finalizar el pelotón echó abajo la aventura de Verona y De Marchi. Empezaba una nueva película. Antes de la última subida, Lutsenko entró muy pasado en una curva, sacó la pierna derecha como un motociclista de GP para equilibrarse y se fue al suelo. También se cayeron, un poco más atrás tras tocar el freno, Serry, Honore y un Pello Bilbao (séptimo en la general, a 54 segundos) que se golpeó contra la base de una farola. En la subida a Zaratamo, Yates atacó con todo el convencimiento y respondió el propio Schachmann, al que siguieron Pogacar, que se cayó a nueve kilómetros de meta pero pudo reenganchar arriba, y Fulgsang. Iban al límite y Omar Fraile no aguantó. El joven esloveno del Emirates se lanzó a tumba abierta bajando y se desgastó demasiado con Yates. Puso al límite al líder en el mano a mano, pero este supo aguantar y en el último instante se anudó al triunfo.