Colbrelli voló en Muscat antes de la Green Mountain
El italiano se llevó el esprint de una etapa a priori de transición en la que hubo mucho ritmo. Lutsenko mantiene el liderato.
Sonny Colbrelli alzó los brazos con rabia. Al italiano se le había escapado la primera y segunda etapa en Omán y quería redención. La tuvo en un esprint que le favorecia. Los últimos 200 metros picaban hacia arriba y era él era uno de los favitos junto con Kristoff y Van Avermaet. Esta vez el noruego acabó quinto y el belga quedó segundo, otra victoria que volvió a rozar, aunque la bonificación le permite arrebatar a Herrada (que fue décimo) la segunda posición en la general. Mientras, Lutsenko mantuvo el liderato sin mayor complicación, este miércoles le tocará defenderlo.
Tras el primer final en alto y antes de la etapa reina, el Tour de Omán vivió un día de transición a priori. Sólo 131 kilómetros entre Yiti y el Centro de Convenciones y Exposiciones de Omán, en Mascate. Pese a lo sencillo sobre el papel, la jornada fue dura, pues el calor y el viento fueron una constante. Dos factores que unidos a lo escarpado del terreno (5 puertos en los primeros 100 kilómetros de la etapa) propiciaron que la jornada de transición fuese nerviosa y no permitiese a los favoritos relajarse.
La fuga del día la formaron cinco hombres (Van Hooydonck, Atapuma, Boswell, Gaudin y Leaveau), que rodaron rápido y acompasados, pero siempre estuvieron a tiro del pelotón. Pese a ello, lograron resistir y obligaron al gran grupo a acelerar. Tanto que de quedó reducido a 60 unidades. Era de día de esprint y descanso, pero lo segundo fue imposible. La fuga fue neutralizada con sólo dos kilómetros hasta la meta. Después llegó la volata y ahora la recuperación, la Green Mountain está a la espera.
La quinta jornada, de este miércoles, saldrá de Samyil y recorrerá 152 kilómetros hasta la esperada montaña. “La Green Mountain es el Alpe d’huez de Omán”, aseguró sin titubeos Pierre-Yves Thouault (directo deportivo de la carrera). Antes de esa cota, que tiene 5,7 kilómetros al 10.5% de desnivel medio, no habrá puertos, pero sí un terreno con continuos toboganes que complicará todo. Lutsenko, que ha ganado dos etapas, será el rival a batir. El primero que quiere desfiarle es Jesús Herrada, que parte con 18 segundos de desventaja en la general, tercero. En la segunda plaza está Van Avermaet a 14”.