Van Aert, obligado a tener un cronómetro por su lentitud

Wout Van Aert tiene por delante un 2019 intenso. El campeón del mundo de ciclocross ha fichado para la próxima temporada por el Jumbo-Visma, de ciclismo en ruta. Van Aert entrenará con el equipo aunque no se unirá de forma oficial hasta el mes de marzo, cuando termine la temporada de ciclocross y comiencen las clásicas de primavera. Ya el año pasado demostró de lo que es capaz en las clásicas, fue tercero en Strade Bianche, logró ser top-10 en Gante-Wevelgem y Tour de Flandes y finalizó 13º en París-Roubaix.

Pero antes, sigue con el ciclocross, donde es uno de los grandes dominadores... y también, como en este caso, de los más criticados. Las regulaciones de la UCI establecen que los tres mejores corredores deben aparecer en el podio dentro de los diez minutos posteriores al último piloto que cruza la línea de meta. Esto, en repetidas ocasiones, Van Aert no lo cumplía. Estiraba y hacía rodillo alrededor de 15-20 minutos, lo que ya provocó el enfado de uno de sus grandes rivales, Mathieu Van der Poel.

La UCI le dio una advertencia a Van Aert y colocó el reloj en la carpa después de la carrera del pasado domingo en Namur, algo que no le gustó mucho. "Ya le dije a la UCI que creo que hay otros problemas que pueden resolverse primero. Me recordó un poco a mi tiempo en la escuela, donde tuve que hacer un sprint en mi bicicleta para llegar a tiempo. También podría apresurarme", afirmó en unas declaraciones recogidas por cyclingnwes.

Estas palabras no sentaron muy bien, y posteriormente Van Aert se disculpó y mostró su conformidad con el reloj. "Quiero disculparme ante la UCI por mis comentarios del domingo después de la competencia sobre el nuevo sistema de cronometraje para la ceremonia del podio", escribió Van Aert, insinuando que será más rápido después de la carrera de la Copa del Mundo UCI en Zolder, est 26 de diciembre. "Estoy de acuerdo con el reloj, dejo las cosas claras para todos. ¡Feliz Navidad, los veo a todos en Zolder!", concluyó.