A pocos días de que la Vuelta presente el recorrido de 2018, el 13 de enero en Estepona, el balance que se hace de la edición de 2017 es muy positivo. Fue la Vuelta más vista en España desde la edición de 2011, con 1,55 millones de media en sus retransmisiones en La 1. “Son buenos datos, pero lo mejor es que no hablamos de incrementos exorbitantes y puntuales, sino que logramos consolidar la tendencia de crecimiento de los últimos años”, explica Javier Guillén, director de la carrera.

Y si los datos generados en España son buenos, también destacan los internacionales, posicionando a la ronda española como la segunda carrera más seguida a nivel mundial por detrás del Tour. Eso hace que se mire con optimismo al futuro a pesar de que se retiren iconos como Alberto Contador (su victoria en el Angliru, la etapa más vista desde 2002), ya que los datos de seguimiento en Francia o Gran Bretaña han crecido. “La Vuelta es un evento internacional, y en esa vertiente cuenta con una gran fortaleza. La ‘marca Vuelta’ goza de una extraordinaria salud”.

Un crecimiento que Javier Guillén vive como responsable desde 2009 y reconoce que se ha trabajado para labrar una identidad propia: “En mi opinión, todo ha influido. La apuesta por tener una personalidad hizo que subiera el seguimiento. Al ser más seguida es más atractiva para los ciclistas. Y que participen figuras como Froome, Nibali... ha repercutido en este crecimiento”.