Amador se reunió con el policía que le multó y le pidió perdón
El ciclista del Movistar había amenazado con "tomar medidas" contra el agente, pero cambió de opinión tras verse en un encuentro a puerta cerrada.
Andrey Amador selló la paz con un apretón de manos con el capitán Marvin Ovares, el oficial de tránsito de Costa Rica que le multó y le decomisó la bicicleta el pasado martes, por rodar por una vía rápida prohibida para los ciclistas: la ruta 27. El corredor del Movistar y el policía protagonizaron aquel día una enorme bronca, en la que cruzaron duras palabras e incluso empujones. A la jornada siguiente, ambos tuvieron una reunión a puerta cerrada en la Dirección General de Tránsito, en San José, donde limaron asperezas.
"Tengo que pedirle una gran disculpa a don Marvin y a todos en Tránsito por la forma tan irrespetuosa y altanera; me encuentro muy arrepentido", dijo Amador en una rueda de prensa posterior, con la voz quebrada. La reunión se celebró por requerimiento de Mario Calderón, director general de Tránsito, que quiso limar asperezas, después de que el corredor hubiera amenazado con "tomar medidas". Andrey Amador acudió vestido con la equipación del Movistar y acompañado por Jorge Villalobos, coordinador del Festival de la Luz de San José, que eligió este año al deportista como Mariscal.
Para recuperar su bicicleta, Amador tuvo que pagar una multa de 50.000 colones (algo menos de 100 euros) en el Consejo de Seguridad Vial (Cosevi), y presentar la documentación que demostraba que la máquina era de su propiedad. Unas diez horas después de la infracción, que se produjo en torno a las seis de la mañana, el ciclista tico pudo retomar los entrenamientos.
Este sábado, cuatro días después de la polémica, Andrey Amador ejerce en San José, su ciudad de residencia, como Mariscal del Festival de la Luz, un tradicional acto de apertura de la época navideña. Por la mañana visitó un hospital de niños.