Keukeleire gana en Bilbao y Contador probó en El Vivero
El belga del Orica se impuso con solvencia en el sprint de un grupo reducido, en el regreso de la Vuelta a la capital vizcaína cinco ediciones después. Dauphiné en directo
Vuelta a España en directo – Etapa 13
Bilbao es sinónimo de ciclismo. Cinco ediciones después del apoteósico triunfo de Igor Antón, un corredor de la tierra, la Vuelta a España regresó a la capital vizcaína. Y no decepcionó. Nunca lo hace. Venció Jens Keukeleire, un belga de 27 años que dio la segunda victoria al Orica en este certamen, tras la conquistada por Simon Yates en Luintra (6ª etapa). Keukeleire logró el mayor éxito de su carrera en el sprint de un grupo reducido, que se había cribado en los dos pasos por El Vivero, que recibió al pelotón abarrotado de público. Ahí lo intentó Alberto Contador, que aprieta siempre que tiene la oportunidad, pero no logró abrir hueco.
“Ganar en el País Vasco es especial. El calor de la gente…”. Así lo describió Esteban Chaves, compañero de Keukeleire en el equipo australiano. Ese calor que nunca debió faltar en la Vuelta, pero que estuvo ausente durante 33 años, desde 1978 hasta 2011, a causa de los conflictos sociales que ahuyentaron a la carrera. Tras normalizarse la situación, la afición vasca, una de las mejores aficiones del mundo, responde siempre ejemplar.
El Vivero, que se coronaba a 13 kilómetros de la meta, hirvió al paso de los ciclistas. El ambiente aguijoneó a Contador, que atacó en sus rampas. Dos ciclistas del Movistar, Dani Moreno y Alejandro Valverde, cerraron la distancia. Chris Froome y Nairo Quintana también replicaron sin problemas. No hubo más pelea entre los favoritos. Quien sí abrió trecho fue Dries Devenyns, un belga de 33 años que ya rozó la victoria en El Naranco, donde cedió ante su futuro compañero en el Etixx De la Cruz. Su ataque parecía destinado al éxito, pero feneció a falta de dos kilómetros.
Keukeleire batió al sprint a Bouet y Felline en la tradicional llegada de la Gran Vía. En el mismo lugar donde unos bolardos mal señalizados tumbaron a Stetina y Pardilla en la Vuelta al País Vasco 2015. Tras ese antecedente y el más reciente de Lugo, Bilbao decidió arrancar directamente de cuajo los pivotes. El primer español fue Luis León Sánchez, otra vez en puestos cabeceros: quinto. El murciano se pilló un buen rebote en la meta, donde se quejó de ser el corredor más marcado en estas guerrillas finales. Cuando demuestras que eres el más fuerte, el ciclismo lo hace ley. Nadie te va a dejar respirar.
Antes de estos movimientos hubo escapada con historia. Más guerrillas. O quizá una partida de ajedrez. El Sky metió entre los siete fugados a dos corredores: David López y Peter Kennaugh. La intención la reveló el ciclista vasco en la meta: “Queremos hacer trabajar al Movistar”. La jugada era evidente. Efectivamente, el equipo del líder es amigo de permitir aventuras intrascendentes para ahorrar energías, pero la presencia del ‘enemigo’ le obligó a tomar la responsabilidad. No se quemó mucho, pero tampoco tuvo un camino plácido por el terreno rompepiernas de Cantabria y Euskadi.
Este viernes hay otra jornada de media montaña, un sube y baja por el País Vasco y Navarra, antes de afrontar el sábado la etapa reina en los Pirineos franceses. El Sky no quiere que el Movistar llegue fresco a la gran batalla: Nairo contra Froome.