Presentada la primera etapa de la XXXVIII Vuelta a Burgos
El primer recorrido, de 158 kilómetros entre las localidades de Sasamón y Melgar de Fernamental, será una oportunidad para los velocistas.
La XXXVIII edición de la Vuelta a Burgos, que se celebrará entre el 2 y el 6 de agosto, arrancará con una etapa de 158 kilómetros entre las localidades de Sasamón y Melgar de Fernamental diseñada específicamente para los velocistas.
Segúno ha confirmado hoy, a través de un comunicado el Instituto para el Deporte y la Juventud (IDJ) de la Diputación de Burgos, entidad organizadora de la prueba, la etapa sólo incluye la ascensión al Alto de Coculina, de tercera categoría.
Al margen de esa dificultad montañosa, el resto de la etapa transitará por un territorio fundamentalmente llano y propicio para los rodadores, en el que la influencia del viento puede ser un factor a tener en cuenta.
No en vano, la zona por la que se rodará ya ha sido testigo de la formación de sendos abanicos en ediciones anteriores de la Vuelta a Burgos, complicando el control de la etapa por parte de los equipos de los favoritos.
En esta ocasión, además, el IDJ ha decidido incorporar un "final de etapa nervioso", con un circuito final de unos 40 kilómetros al que se darán dos vueltas, tal y como también ha quedado planteado para la tercera etapa de la ronda burgalesa, que se celebrará entre Valle de Sedano y Villarcayo.
Además de incorporar una etapa llana, la intención del IDJ con el diseño del recorrido pasa por poner en valor el proyecto cultural de 'Las Cuatro Villas de Amaya', una ruta en la que se unen los cuatro centros de interpretación de Castrojeriz, Melgar, Sasamón y Villadiego y en la que se muestra la riqueza histórica, patrimonial, cultural y paisajística de la zona.