VUELTA A ESPAÑA | ÚLTIMA ETAPA
Aru conquista su primera grande
Degenkolb ganó al sprint la última etapa en Madrid. En la meta también alzó los brazos Fabio Aru como campeón de la Vuelta 2015. Valverde quitó el maillot verde a PuritoVuelta a España 2017: Etapa 21, Madrid
John Degenkolb tuvo que esperar a la última etapa de Madrid para alzar por fin los brazos en la Vuelta a España 2015. De paso, el alemán dio una alegría al equipo Giant, un día después de la amarga experiencia que vivió Tom Dumoulin en la Sierra de Guadarrama. La jornada también deparó un cambio de líder de los puntos, porque Alejandro Valverde ganó el sprint intermedio de Cibeles y volvió a arrebatar el maillot verde a Purito Rodríguez en la etapa final, como ya hizo en 2012. No le hizo mucha gracia al catalán. El murciano se aseguró así su presencia individual en el podio (también subió por equipos con el Movistar). Ahí mismo, ante la Cibeles, mientras caía la noche en la capital, el italiano Fabio Aru recibió los máximos honores como campeón.
A los 25 años, Fabio Aru se ha confirmado entre los grandes del pelotón al conquistar su primera gran vuelta por etapas, en la misma temporada que ha acabado segundo en el Giro de Italia por detrás de Alberto Contador. El italiano ha sabido asumir los galones del Astana, tras la expulsión de Vincenzo Nibali, y brindó en la penúltima jornada un soberbio espectáculo en los puertos de Madrid que le sirvió para adueñarse del maillot rojo. Una prenda, por cierto, que estrenó con ese color su compañero y jefe Nibali en 2012. Después de aquella victoria en la Vuelta, el ‘Tiburón’ ha ganado también el Giro y el Tour. Ahí están los nuevos retos del propio Aru, que todavía no ha debutado en la Grande Boucle.
El cajón lo han completado dos corredores de diferente perfil. Por un lado, un veterano como Purito Rodríguez, que a sus 36 años ha sabido aprovechar las nueve metas en alto para lograr su mejor clasificación de siempre en la Vuelta, segundo; para llevarse una etapa, en Sotres; para vestirse un día de rojo, en Ermita de Alba; y para sumar su cuarto podio en una grande. Junto a él subió Rafal Majka, un ciclista de 26 años que ya tenía tres victorias de etapa en el Tour y que, liberado de su trabajo habitual para Contador, se ha reivindicado aquí como un ciclista para las principales vueltas.
El gran ausente en ese top-3 ha sido Tom Dumoulin, el mayor descubrimiento de esta edición, que al menos pudo recibir el reconocimiento de los madrileños cuando recogió el premio de la combatividad. Al neerlandés le sobraron dos kilómetros en la Morcuera para poder erigirse ganador. Su director reveló este domingo que estaba enfermo. A sus 25 años, y con sus conocidas dotes de contrarrelojista, Dumoulin ha dado un salto gigante al demostrarse que puede superar las grandes montañas no muy lejos de los escaladores y también asumir el esfuerzo de tres semanas. A su edad, tendrá más oportunidades de lucir su talento.
Otra presentación en la alta sociedad la ha protagonizado Esteban Chaves, un colombiano de 25 años que rebosa frescura y simpatía, pero que sobre todo se ha confirmado como un brillante ciclista, al conquistar dos victorias de etapa y terminar en el quinto puesto de la general.
Entre Chaves y el podio se ha colocado otro colombiano, Nairo Quintana, de quien siempre se espera algo más. Llegó a la Vuelta con pocas ganas, empujado por el patrocinador, y ya puesto en faena sufrió una enfermedad que ha mermado su rendimiento. Tampoco ha podido pujar por el triunfo Valverde, afectado igualmente por una caída, aunque en este caso cierra la carrera con un triunfo de etapa en Vejer de la Frontera. El Movistar se lleva la consolación de la clasificación por equipos, que tanto gusta en esa casa y que tan poco emociona a los aficionados.
Si una mira en el retrovisor, todavía podríamos preguntarnos qué pasaría si Vincenzo Nibali no hubiera sido expulsado, si Chris Froome no se hubiera caído en Andorra… Seguramente se habría vivido una carrera muy diferente, posiblemente ahora estaríamos escribiendo sobre el doblete del británico o sobre la cuarta grande del 'Tiburón'… Pero el ciclismo se escribe día a día… Y ahí, Fabio Aru ha sido el mejor. Y lo será en más citas del futuro.