Queda sólo media montaña y la sierra de Segovia y Madrid

Después de la crono de Burgos, el pelotón afrontará las tres últimas oportunidades para que se produzcan cambios en la general. El top-ten envió mensajes de inconformismo, así que camino de Riaza dispondrá esta tarde de media montaña y de la subida a la Quesera (de primera) a 14 kilómetros de la meta. El puerto, de diez km al 5,2%, tiene rampas que alcanzan el 7%. Sin embargo, la vertiginosa y técnica bajada podría complicar más las cosas que la ascensión. El firme de la calzada, rugoso y bastante bacheado, se reasfaltó hace una semana… y la gravilla de la operación de adecuación preocupa a los que conocen la zona.

Fabio Aru se encuentra a sólo tres segundos de Tom Dumoulin. Y el Lotto-Jumbo ayudará al Giant en “la medida de las posibilidades”. Así se expresó su director, Merijn Zeeman, en una entrevista con NOS (Radiodifusión de los Países Bajos): “Somos dos equipos neerlandeses con relaciones francamente amistosas, así que queremos respaldar a Dumoulin. Deseamos que uno de nuestros compatriotas conquiste la Vuelta (el último fue Joop Zoetemelk, en 1979), aunque tampoco disponemos del mejor bloque para controlar en la montaña”.

Addy Engels, técnico del Giant, no recogió el guante: “Eso está prohibido por las normas de la Unión Ciclista Internacional. Por tanto, apoyaremos a Tom en la medida de nuestras capacidades y no recurriremos a ninguna estrategia irreglamentaria. Contamos con un grupo muy ilusionado con la opción de que Dumoulin vista el maillot rojo en Madrid”. Aun así, Eggels reconoce sus limitaciones: “No trajimos un equipo pensado en que uno de nuestros corredores cogiera el liderato. Buscábamos victorias con Degenkolb y con Tom. Llevamos dos y somos primeros. La situación supera nuestras expectativas”.

Para mañana, más perfil quebrado y la Paramera (segunda) a 16 km del repecho final de Ávila. Y el sábado, el no va más: cuatro subidas de primera en la sierra de Segovia y Madrid: Navacerrada, Morcuera (dos veces, una por vertiente) y Cotos. En el Giant consideran que la prueba de fuego, tanto para Dumoulin como para la escuadra, llegará aquí: “Y el objetivo es que Tom luzca de rojo en el podio”.

Bonificaciones: hasta 13” al día

La pírrica diferencia de tres segundos que ha dejado la crono de Burgos entre Tom Dumoulin y Fabio Aru hace que las bonificaciones puedan jugar también un papel importante en la general. En cada etapa se reparten segundos en los sprints intermedios (3”, 2” y 1”) y en la meta (10”, 6” y 4”). Hoy el sprint se encuentra en Campillejo, a 47 km de Riaza. Estas bonificaciones existen hasta la última etapa en Madrid.