-¿Qué tal la primera toma de contacto con su nuevo equipo?

-Muy bien. A algunos chicos ya les conocía de antes. A los que no, me parecen buena gente, como el staff técnico y las personas que tenemos alrededor. Los primeros stages y carreras siempre son positivos para hacer grupo.

-¿Y con Contador, cómo fue?

-Muy bien, es un buen chaval y un magnífico ciclista.

-¿En qué idioma se entienden?

-Con un poco de inglés, otro poco de castellano, también italiano... una mezcla.

-¿Cómo valora el anuncio de la posible retirada de Contador en 2016?

-Se trata de su problema, no del mío. Si sólo sé lo que se ha publicado, me resulta complicado comentar esta noticia sin datos o su opinión.

-¿Por qué eligió el Tinkoff como destino?

-Por Biarne Riis. Habíamos entablado una buena relación anteriormente. Es un líder, con las ideas claras para dirigir una estructura.

-¿Le han marcado Tinkov o Riis algún objetivo concreto?

-Debo dar un paso adelante y conquistar un Monumento, o una gran clásica. Me gustaría ganar en Flandes, Roubaix y San Remo.

-Ha acumulado muchos segundos puestos, pero no cuenta con una gran victoria. ¿Qué le falta?

-Añadir consejos de mi escuadra y mi director en cuanto a calendario, preparación y táctica. Quizá debo competir de manera más estratégica e inteligente. Necesitaba este cambio para continuar con mi evolución. Ahora, me entrena Bobby Julich y nos va bien.

-¿Supone más presión un contrato millonario?

-Me siento bien y muy contento. Lo que tengo que hacer es corresponder en la carretera a la confianza que han depositado en mí. Me dejaré hasta la última de mis fuerzas en la campaña de clásicas. La presión la nota siempre, en cada prueba en la que parto como favorito. No será un extra. Los chicos del Tinkoff me apoyan y deseo vencer mucho con este nuevo maillot.

-Compartir alineación con Contador, ¿le beneficiará o le perjudicará en el Tour?

-En 2012 ocurrió con Nibali una cosa parecida, y él terminó tercero de la general y yo me llevé el maillot verde. No creo que seamos corredores incompatibles, al revés.

-¿Pero teme que no le arropen lo suficiente?

-Ya veremos si estoy más o menos protegido que mi anterior equipo.

-¿Es un reto conseguir el cuarto jersey verde?

-Ya veremos, aún la considero una meta muy lejana. Hay que ir paso a paso, primero preparar las clásicas en Qatar y Omán, intentar lograr cosas y llegar en la mejor forma posible.

-Parece que en este 2015 tendrá como rival a Lobato en bastantes sprints. ¿Cuál es su opinión de él?

-Sólo pienso en mí, no sé qué decir de los demás. Me da igual. Lo hace bien, ya veremos.

-Esta temporada cumple 25 años, todavía es joven y acumula excelentes resultados. ¿Algo que cambiaría, algo que le motivaría añadir?

-Me veo bien así, no hay dar vueltas al pasado, aunque existan temas que preferirías realizar de otro modo. Ya veremos en el futuro.

-¿Le crispa no haberse estrenado en 2015?

-Si no lo consigo en toda la campaña, sí. Por ahora no sucede nada malo, los grandes objetivos vendrán más adelante (no levanta los brazos desde junio de 2014, con su título de campeón eslovaco).