Vuelta a España
Chris Froome regula según los datos del potenciómetro
“Se trata de una herramienta más. No estoy al 100% y doy el máximo”. Sobre su pérdida de tiempo en los Lagos, tampoco se sobresaltó: “Continúo en la lucha, es lo importante”.
Chris Froome es un ciclista que deja pocas cosas al azar, aunque en Jerez aseguró que no había estudiado el libro de ruta y que no conocía ninguna etapa de montaña. Pero, particularmente y como reconocen en el Sky, al británico le preocupa el potenciómetro (de la marca Garmin) del manillar, que suele mirar con frecuencia en las ascensiones. Ahí aparecen los siguientes datos: pulsaciones, vatios, cadencia de pedaleo, velocidad, tiempo y temperatura.
En los entrenamientos, los corredores realizan tests de esfuerzo y registran la información: ahí descubren aproximadamente dónde se encuentra su límite. Por eso, según los datos que ve en carrera y por las sensaciones de su cuerpo, Froome sabe cómo debe actuar y en qué momento puede apretar más. Samuel Sánchez es otro que suele regular a tenor de los indicativos que lee en su pulsómetro.
Mikel Nieve, el mejor gregario de Froome, explica cómo se desempeña su compañero: “Más que obedecer a lo que dice la pantalla, se guía por cómo nota las piernas. Lo mira, pero no se basa en eso para competir”. El protagonista le resta importancia: “Se trata de una herramienta más. No estoy al 100% y doy el máximo”. Sobre su pérdida de tiempo en los Lagos, tampoco se sobresaltó: “Continúo en la lucha, es lo importante”.