Froome remacha la general y Dani Moreno se sube al podio

El italiano Alessandro De Marchi conquistó a los 27 años su mejor victoria profesional, al rematar agónicamente una larga escapada en el alto de Risoul, en la octava y última etapa del Dauphiné, cuya general se ha llevado Chris Froome, quien no sólo no tuvo sobresaltos, sino que volvió a exhibirse para cruzar segundo la meta, a 24” del fugado. Su compañero Richie Porte redondeó la dictadura del Sky con la segunda plaza en el podio, que completó Dani Moreno (Katusha) en detrimento de Michael Rogers (Saxo).

La lluvia marcó el devenir de esta jornada final, que deparó numerosos abandonos y varias caídas, entre ellas una de Alberto Contador en el descenso del Vars, el puerto anterior a Risoul, que envió a casa a Luis Ángel Maté. De Marchi, muy activo durante todo el Dauphiné, salió de una escapada de una veintena de corredores que se formó en el km 14 de la etapa. La fuga se fue cribando hasta que en las faldas de la última ascensión se formó un quinteto con el propio De Marchi, Wellens, Quinziato, Meyer y Losada, único superviviente español de los ocho que iniciaron la aventura. Primero se destacó Wellens, pero el italiano le capturó y sobrepasó.

Antes, en Vars, Alejandro Valverde volvió a mostrar la ambición que ha exhibido durante todo el Dauphiné y se lanzó al ataque, aunque otra vez tuvo más voluntad que fuerza para mantener su embestida.

En el descenso de ese puerto se produjo la caída de Contador, quien aparentemente no sólo no sufrió daños serios, sino que mantuvo energía para atacar en la ascensión… Una ofensiva extraña, producto de su casta y de su orgullo, que provocó el efecto contrario al deseado: su compañero Michael Rogers se descolgó del grupo de gallos. Alberto se dejó caer para ofrecer su rueda al australiano, que aun así perdió la tercera plaza del podio en favor del madrileño Dani Moreno. Contador volvió a ejercer de gregario, pero no pudo salvar a su compañero.