"Este trabajo sin pasión no lo puedo concebir"

Tras los Alpes, ha salido como el máximo rival de Wiggins y el Sky. ¿Se siente preparado para el asalto al podio?

La clave para ganar una gran ronda reside en correr con cabeza y corazón. El equipo me aporta el cien por cien de su confianza, y yo espero devolvérsela en la carretera. Está claro que tanto Wiggins como Froome son dos especialistas contra el crono, por eso debo atacar para intentar batirles en la montaña que falta. La contrarreloj de 53,5 km me penaliza.

Usted es el favorito que más lo ha intentado, y fue muy crítico con la gente conformista.

No concibo más forma de hacer las cosas que dejarse todo en la carretera. Pongo pasión en mi trabajo, y me siento orgulloso de que la afición se identifique conmigo. No sé si los demás se quedarán parados, yo espero aprovechar todas las ocasiones que el recorrido me ofrezca hasta París.

Entonces, ¿ve factible el cajón? Se trata del único que le falta de las tres grandes. (Nibali ha sido tercero del Giro 2010, segundo en 2011, y ganó la Vuelta de 2010).

Llegué a Lieja con esa determinación. He probado que puedo competir con los ciclistas de primer nivel, así que en este Tour dispongo de una gran oportunidad para reafirmarme en la élite. No me gusta hacer promesas, sólo deseo dar siempre lo mejor de mí mismo.

(Su manager, Roberto Amadio, ha declarado que Nibali está en condiciones de derrocar al Sky y conquistar la Grande Boucle, a pesar de la desventaja con la que cuenta en este momento: a 2:23 de Wiggins, y a 18 segundos de Froome).

¿Significó la Vuelta de 2010 un punto de inflexión?

Por supuesto. Me preparé a conciencia, y durante toda la prueba tuve que luchar contra los españoles, que me atacaron siempre que pudieron. La victoria supuso mi confirmación a nivel internacional entre los mejores corredores. Me da tranquilidad y orgullo contemplarla en mi palmarés.

¿Guarda buenos recuerdos de España?

Gratísimos. Por mi triunfo, las sensaciones tan bonitas durante las tres semanas, el público de vuestro país Fueron una carrera y una experiencia que nunca olvidaré.

¿Le gusta su apodo, El Tiburón del Estrecho?

Sí, porque resume muy bien mi carácter y mi origen en la isla de Sicilia. Además, sugiere peligro.