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Ciclismo | Tour 2010

"Pedalearían aún más con un lechazo con patatas"

Paco Olalla es el cocinero de Contador durante el Tour
Vuelta a España 2017

<b>ENTRE LOS FOGONES. </b>Paco Olalla, en la cocina preparando la comida para Alberto Contador.
JESÚS RUBIO

Anoche, Alberto Contador cenó rodaballo. Pescado fresco preparado por el cocinero que se ha traído al Tour para que cuide de los nueve chicos del Astaná en este mes de julio. Paco Olalla, nacido en Arandilla (Burgos) hace 58 años, es el rey del fogón del Astaná. Tras ser el cocinero del equipo español en la etapa de Paco Antequera como seleccionador, Olalla ha aprovechado su "2010 sabático" para entrar de lleno en la dieta del doble ganador del Tour. "Alberto me come muy bien, no se preocupe".

Olalla va "de hotel en hotel", sin apenas ver ciclistas que no sean los de la formación kazaja "A veces voy al mercado", dice. Se encarga del desayuno y de la cena. Para la primera comida del día, esencial, Olalla ya le ha cogido el truco a las apetencias del de Pinto. "Una tortilla de dos huevos, cereales con leche de soja, el arroz blanco pilaf más una compota que preparo con la avena que trae Vinokourov". Deseos del kazajo. "Se la comen todos. Es avena, agua, sal Sale buenísima".

Más hidratos por la noche, para después del masaje y las reflexiones de una etapa que siempre es dura y estresante en el Tour. "Después del pavés del martes se comieron cuatro kilos de pasta entre los nueve. Es una barbaridad. Suerte que en el camión tenemos 80 kilos más. Luego quieren carne roja, pollo con un puré de patatas La cena es un momento en el que están todos impacientes, aunque he encontrado la manera de entretenerles en el aperitivo". Paco se ha traído tres jamones de bellota desde España. "A todos les gusta. A los kazajos también. Si se acaban llamaré a un amigo para que me traiga más. Eso no es un problema". Saciados por la buena plancha de Olalla, estos nueve deportistas no podrán degustar en este Tour su especialidad. "No, es imposible. No les puedo preparar un buen lechazo con patatas panaderas". Muy pesado, ¿no? "Estoy convencido que el lechazo les haría pedalear aún más", contesta medio bromeando. Quizá en París. "Si ganamos, les haré lo que les apetezca".