Zach LaVine, carne de traspaso en Chicago Bulls
Los Bulls ya busca un traspaso por Zach LaVine. Es uno de sus tres jugadores más determinantes y con contrato largo, por lo que esperan una buena recompensa.
La resistencia del trío que en Chicago Bulls forman Nikola Vucevic, DeMar DeRozan y Zach LaVine va cediendo por momentos. Este último está en la agenda de varios equipos para reforzarse y su salida está cada vez más cerca. Shams Charania y Darnell Mayberry informan en The Athletic sobre el interés en los Bulls por buscarle un nuevo destino: “Hay franquicias de la NBA que están probando la disponibilidad de LaVine y existe un creciente aperturismo por ambas partes a la hora de ir a por un traspaso”. Algo se ha vuelto a romper en los Bulls con un LaVine que precisamente esta temporada había empezado como una moto: 21,9 puntos por partido y una excelente actuación de 51 en Detroit.
RELACIONADO | ¿Reiniciar o retocar?
LaVine se ha visto coartado en ataque al tener que compartir los tiros con dos referentes en la ofensiva como Vucevic y DeRozan. Con DeMar, además de roces de convivencia, está la posición: ambos pueden actuar como escoltas y es Zach el que mantiene el puesto mientras que su compañero hace las veces de alero cuando ambos están sobre el parqué.
Desde el citado medio también apuntan a DeRozan. Su futuro también es “incierto” y en ese caso también cuenta el contrato que tiene: es expiring, finaliza cuando llegue el verano, por lo que hay que intentar sacar rédito por él.
LaVine está sólo en su segundo año de un acuerdo de cinco años por el máximo recogido en el convenio colectivo. Este año cobra cuarenta millones de dólares. El campeón del Concurso de Mates ya cumple su sexto año en los Bulls después de haber pasado una primera etapa profesional en los Timberwolves de Minnesota. Momento para cambiar de aire.
RELACIONADO | Así, las horas contadas
Los Bulls de los jóvenes tuvieron su oportunidad cuando Lonzo Ball, el manejador desde el puesto de base, estaba sano. La lesión y relesión del director de juego rompió el esquema y resquebrajó a los de Billy Donovan, que son una sombra de sí mismos. Nunca llegaron al punto de pelear los playoffs, pero la creencia es que podrían hacerlo durante varias campañas con el equipo a punto de forma. Coby White y Patrick Williams se han quedado rezagados en progresión. Se han añadido piezas como Alex Caruso o Ayo Dosunmu que tampoco han dado el gran paso. Y, con todo ello, el grupo ha quedado tocado. La mala gestión de las posesiones sin Lonzo en cancha ha llegado a que DeRozan y LaVine estén en un punto de no retorno, haciendo la guerra cada uno por su cuenta.
Opciones sobre la mesa para LaVine
En The Rally (Bally Sports) Charania aseguró que hay tres equipos que esperan ofrecerse para ser el equipo receptor de Zach LaVine y proponer un intercambio.
· Heat. Fue uno de los conjuntos más activos durante el verano para conseguir a Damian Lillard, pero los Trail Blazers viraron el rumbo en el último momento y el base se marchó a los Bucks. Los subcampeones buscan de nuevo mover sus piezas en el mercado ahora que dos de los escoltas con los que llegaron tan lejos, Vincent y Strus, ya no están en plantilla.
· Lakers. Durante estos días se vuelve a hablar de la necesidad de una tercera estrella en L.A. que acompañe a LeBron James y Anthony Davis y esta noticia sobre LaVine llega a punto. Con la facilidad para defender de ellos dos, Hachimura o Vanderbilt puede encajar bien siempre que el base que esté con ellos, Russell o Reaves, también se aplique. Vuelven a coger notoriedad unas palabras de él en 2020 en ESPN: “Todo el mundo quiere jugar con los mejores jugadores del mundo. Me encantaría jugar con, por ejemplo, LeBron, pero no son fáciles ese tipo de oportunidades”.
· Sixers. Les quitaron de encima a James Harden, un jugador que ya no quería estar en Filadelfia con Embiid, y ahora falta retocar a gusto de Morey lo que el traspaso anterior les ha dejado. Tienen monedas de cambio de cierta valía como los recién llegados Batum, Covington o Marcus Morris. Y el encaje de Maxey, ahora con más poder, aún está por ver.