Una ‘guerra de los sexos’ en la línea de tres del próximo All Star de la NBA

Sabrina Ionescu (26 años), californiana de Walnut Creek con sangre rumana, es una de esas jugadoras que están revolucionando el baloncesto femenino. Fue una gran estrella universitaria en Oregon, con hitos que nadie había logrado en College sin distinción de sexos: más de 2.000 puntos, 1.000 rebotes y 1.000 asistencias y récord de triples-dobles. En 2020, cuando por ejemplo ya había sido una de las ponentes en la ceremonia pública de homenaje a Kobe Bryant tras la muerte de la leyenda de los Lakers, fue seleccionada con el número 1 del draft de 2020 y llegó además, nada menos que a Nueva York para jugar con las Liberty.

Desde entonces, ha sido dos veces all star, ha ganado un Mundial con Estados Unidos (está en la prelista para los Juegos de París) y, en uno de sus hitos más mediáticos, ganó el último concurso de triples del All Star de la WNBA con una actuación asombrosa: el pasado 14 de julio, logró la anotación más alta en la historia del concurso (NBA y WNBA), 37 puntos que dejaron atrás los 31 con los que habían hecho cima antes Stephen Curry (2021) y Tyrese Haliburton (2023). En la WNBA, el récord estaba en los 30 puntos que había amasado Allie Quigley en 2022. La base lo hizo con una apabullante serie de tiro: 25/27.

Ionuescu sumó 37 de 40 puntos totales con un trance en el que llegó a anotar 20 triples consecutivos. El propio Curry se rindió en cuenta de Twitter (“¡RIDÍCULO!”) a la jugadora que le había quitado el récord y que luego le retó: “¿Un mano a mano?”. En su carrera WNBA, Ionescu está en un 37,7% en triples con 2,6 anotados por partido. La pasada temporada acabó con un 44,8% y 3,6 por partido (tope de la competición).

Pues bien, ese duelo Curry-Ionescu puede llegar en el próximo All Star de la NBA que se celebrará en Indianápolis (16-18 de febrero), en el Gainbridge Fieldhouse, el hogar de Indiana Pacers. Según el periodista Shams Charania, una de las fuentes de información más fiables en el mundillo NBA, los dos tiradores han planeado ese enfrentamiento para el fin de semana de las estrellas. Además, el micrófono que llevaba Stephen Curry durante el calentamiento previo al Warriors-Kings de esta noche pareció confirmar estos rumores cuando aireó la conversación del base con el rookie Brandin Podziemski (“creo que tenemos que llevarla y resolver este asunto de una vez por todas”). Ionescu recogió el guante al momento: “Hagámoslo, nos vemos en la línea de tres”.

Si los méritos como tiradora de Ionescu son incuestionables, con Curry se acaban las palabras: ha ganado dos concursos de triples (2015 y 2021), un asunto en realidad casi anecdótico para el mejor tirador de todos los tiempos. Tiene más triples que nadie en la historia de la NBA (3.562 antes de jugar contra los Kings, el único con más de 3.000). También es el único que ha superado los 400 triples en una temporada (402 en la 2015-16) y posee cuatro de las cinco mejores marcas (la otra esa de James Harden, que anotó 378 en la 2018-19). En su carrera, Curry promedia casi 4 triples por partido por encima del 42%. Esta temporada está en 4,5 (su mejor marca es 5,3) con un 40%. De otro mundo.