Posible suspensión para Green
El ala-pívot agredió a su compañero Jordan Poole en el entrenamiento de ayer miércoles. Tuvieron que ser separados por el resto de su equipo.
Lío en el campeón de la NBA a menos de dos semanas del inicio de la regular season 2022-23: Draymond Green se expone a posible suspensión de Golden State Warriors por agredir a su compañero Jordan Poole. La franquicia está analizando unos hechos que tuvieron lugar en el entrenamiento de ayer miércoles, cuando “Green pegó un puñetazo a Poole”, según ESPN, después de un enganchón en el que ambos cruzaron insultos y acusaciones. Poole no tuvo ningún problema físico serio como consecuencia del altercado y pudo terminar el entrenamiento, aunque desde el equipo se decidió acortarlo y reunirse en el vestuario para templar los ánimos.
Lo normal es que Green sea sancionado ahora por los Warriors ya que fue el que llevó las cosas demasiado lejos y convirtió en un conflicto serio lo que parecía un problema normal de entrenamiento. Al parecer, Green y Poole “tienen una historia detrás” (según el periodista Chris Haynes) y sus cruces verbales son habituales en los entrenamientos, según The Athletic, el primer medio que dio la noticia. Simplemente, Green traspasó esta vez los límites con su agresión. Haynes también apunta que en el vestuario hay comentarios sobre “un cambio de actitud” de Poole que estaría vinculado con el hecho de que puede estar cerca de firmar su primer gran contrato multimillonario.
El ala-pívot, de 32 años, lleva en los Warriors una década (desde 2012: número 35 del draft) y es uno de los esenciales del núcleo duro de uno de los mejores equipos de la historia. Lleva cuatro anillos, ha sido cuatro veces all star y una Mejor Defensor de la NBA. Poole (23 años), un escolta que es puro talento anotador, ya no es un recién llegado (número 28 del draft en 2019) y su contribución fue muy importante la pasada temporada, incluidos los playoffs y las Finales contra los Celtics.
Curiosamente, ambos tienen pendiente la posible extensión de contrato. Green ha reconocido que, con la presión salarial a la que se enfrentan los Warriors, será difícil que esta llegue para él por ahora (le queda esta temporada que va a comenzar y tiene una player option de más de 27 millones de dólares para la 2023-24). Poole sigue con su contrato rookie y esperaba hacer ya caja a lo grande, pero los Warriors por ahora están siendo cautos. Cobrará apenas 3,9 millones y será agente libre restringido la próxima temporada, 2023-24, si no hay acuerdo antes y en plazos (17 de octubre, fecha límite). Poole quiere más de 100 millones en esa extensión, los Warriors se lo piensan.