Olivier Rioux ya mide 2,36
El fenómeno canadiense, un pívot de 18 años que jugará en Florida, sigue creciendo: si llega a la NBA será el más alto de la historia de la Liga.
En noviembre los Gators de Florida se aseguraron el compromiso, para la temporada 2024-25, del pívot canadiense Olivier Rioux. De primeras, no era una noticia de primera magnitud para una universidad de tanto prestigio, acostumbrada a pelear por los mayores talentos del baloncesto norteamericano. Rioux tenia ranking de proyecto tres estrellas (los grandes aspirantes a estrella llegan a cinco) y ocupaba el puesto 147 en los rankings de futuribles para college.
Era hace unos meses, básicamente, un pívot por hacer, de fundamentos todavía muy rudimentarios, verde y con mucho trabajo por hacer en la prestigiosa IMG Academy. Pero Rioux sí tenía otra cosa que provocó que su acuerdo con Florida hiciera bastante ruido: el de Quebec tenía el récord Guinness del adolescente más alto del mundo. Con 15 años, en 2021 y cuando se ganó esa distinción, medía 2,26. En el baloncesto estadounidense creían que podía evolucionar en un molde similar al de otro pívot canadiense, Zach Edey, estrella universitaria en Purdue (dos veces Mejor Jugador Nacional) con sus 2,24 y una ética de trabajo que le ha hecho progresar mucho y apuntar alto de cara al draft 2024 que se celebra la próxima semana.
Rioux vuelve a ser noticia, antes de llegar siquiera a los Gators, porque su perfil físico se ha actualizado y sigue creciendo: ahora le dan 2,36 de altura y se considera que todavía puede ir a más. En la NBA, los jugadores más altos de la historia siguen siendo Gheorge Muresan y Manute Bol, que medían ambos 2,31. Y después, con 2,29, Tacko Fall, Shawn Bradley y Yao Ming. El más alto ahora es Victor Wembanyama con sus 2,24 y, eso sí, unas facultades para jugar por toda la pista que no tuvieron ni tienen el resto de gigantes citados.
El padre y el hermano de Rioux rozan el 2,10 y su madre, 1,90. Su proyección va a más, aunque los ojeadores siguen sin estar del todo convencidos de que puede ser una estrella. Sí, claro, un jugador diferencial en defensa cerca del aro: “Absorbe una cantidad ingente de espacio en pista, aunque no es precisamente el tipo más rápido de pies. En tramos cortos, puede colapsar la zona, alejar a los rivales del aro y dominar el rebote. En ataque, tiene buenas manos y toque, pero tiene que mejorar su coordinación, especialmente en las reacciones rápidas que exigen los partidos”.
En el ámbito internacional, Rioux es conocido por su participación en los torneos Sub con Canadá. EN 2022, pasó por Málaga en el Mundial Sub-17, con solo 16 años. Su vinculo con España. además, no acaba ahí. En 2019, fue parte de la cantera del Real Madrid cuando contaba con 13 años. En ese momento medía 218 centímetros y llamó la atención de los aficionados del baloncesto de cantera… pero también de los jugadores de la primera plantilla de fútbol blanca, que no desaprovecharon la ocasión para hacerse fotos con un chico que no se estableció en la capital y puso rumbo a Estados Unidos para continuar una formación que va a desembocar en la prestigiosa Universidad de Florida. En 2018, con 12 años y 2,13 de altura, sorprendió en el Torneo de La Roda, prestigioso campeonato de minibasket sub-12. Con el Frenchy Phenoms francés jugó la final contra el Real Madrid, ante de pasar el club blanco, y anotó 26 puntos aunque el triunfo fuera para los blancos.
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