Noche negra de Luka Doncic
Partido horrendo de los Mavericks, incapaces de anotar con fluidez en Orlando, donde se estrellaron contra unos Magic sin Paolo Banchero. Doncic, muy mal.
Después de una racha de cuatro victorias, con apuros pero con tramos de baloncesto muy sólido (y con un Luka Doncic estelar) los Mavericks se la pegaron a base de bien. En el primer partido de un back to back a domicilio pero con buena pinta: para empezar los Magic son Paolo Banchero un número 1 del último draft que está jugando como tal (de maravilla), hoy los Wizards que estarán sin Bradley Beal, su gran estrella.
Pues a la primera… costalazo (94-87). En partido que adelantó hora y media su inicio por la llegada del huracán Nicole, los Mavericks dieron una imagen calamitosa, a la cabeza un Luka Doncic que jugó su peor partido de la temporada y dejó en nueve su racha de partidos de 30 puntos o más para abrir curso. Ahí queda como la segunda mejor de la historia, (muy a salvo) la de 23 de Superman, el Wilt Chamberlain del inicio de los sesenta (1962-63). Doncic anotó 24 puntos, capturó 6 rebotes y repartió 6 asistencias sin una sola pérdida. Pero su estadística de tiro fue desastrosa: 9/29, 2/11 en triples, 4/7 en tiros libres. Jugó mal antes de los minutos finales, y en esos decisivos no pudo remendar su noche. Cuando regresó a pista en el último cuarto, siguió forzando… y siguió fallando. En esos 12 minutos los Mavs anotaron 13 puntos (21-13) y acabaron en 87 contra un rival que venía de recibir 126 (con prórroga) y 124 de dos rivales menores como Kings y Rockets.
Con su montaña de tiros fallados (37.6% en lanzamientos totales, 26% en triples, 63% en tiros libres) los Mavs estaban por delante en el ecuador del último cuarto (82-83), antes de deshacerse totalmente (5/18 en tiros en ese parcial definitivo) y confirmar que no era la noche. Para nada. Perdieron 14 bolas menos (18-4) pero ese cuidado de las posesiones no sirvió para nada porque fallaron todo lo que tiraron y el ataque, disciplinado de inicio, acabó en una yerma guerra de guerrillas. Y porque la defensa fue como mínimo porosa (los Magic vivieron en anotar en la zona toda la primera parte) y el rebote, una escabechina: 49-29.
El guion solo se cumplió durante un cuarto y pico (24-34). A partir de ahí, los Mavs decepcionaron. Solo Spencer Dinwiddie, tras su mal partido contra los Nets, tuvo una jornada fina: 29 puntos, 5 asistencias. Sin Christian Wood, con una rodilla tocada, y con Doncic off, no hubo mucho más: fallaron sin parar Finney-Smith, Tim Hardaway Jr y un Reggie Bullock que no ve el aro en este inicio de temporada. Sin Wood, los Mavs parecieron pequeños contra un equipo de tremenda envergadura. Sin acierto por fuera, podría haber tenido más minutos el (por fin) emergente Josh Green.
Los Mavs quedan en un correcto 6-4, con cierta obligación de ganar esta noche a un ex, Kristaps Porzingis, para que un prometedor back to back no acabe en catástrofe. Los Magic ganaron su tercer partido (3-9) en su primera noche sin el excelente Banchero. Fran Wagner lideró (22 puntos, 6 asistencias), Chuma Okeke fue titular e hizo un gran trabajo defensivo sobre Doncic y el resto lo pusieron Jalen Suggs (12+7+4), Wendell Carter Jr (13+12), Mo Bamba (12+6) y un Bol Bol que por fin se siente jugador NBA (11+7).