Los Hornets se hartan de Kai Jones
El pívot de 22 años ha sido apartado del equipo después de semanas de comportamiento errático y muy preocupante en las redes sociales.
En una decisión que parecía cantada y que ya es oficial, Charlotte Hornets ha decidido apartar del equipo hasta nueva orden al pívot Kai Jones (22 años). “No participa en el training camp por razones personales. No hay plazos por ahora para que regrese a la disciplina del equipo. Por respeto a que se trata de un asunto de naturaleza personal, no habrá ningún comentario público más al respecto”, dice el escueto comunicado de la franquicia de Carolina del Norte.
Era algo que parecía un paso obvio por parte de los Hornets después de semanas de comportamientos erráticos de Jones en las redes sociales, un patrón que ha provocado mucha preocupación por el bienestar mental del jugador de Bahamas, que tampoco estuvo con su selección en el torneo de clasificación en el que otros NBAs como Deandre Ayton, Buddy Hield y Eric Gordon llevaron al equipo al Preolímpico con un triunfo histórico para Bahamas en Argentina.
Jones apareció en septiembre empapado en sudor y sin articular bien sus palabras en un directo de Instagram que acabó teniendo más de 16 millones de visualizaciones. Después ha tenido intervenciones sonadas (y preocupantes) en Twitter para criticar a compañeros, asegurar que podría superar al mejor Shaquille O’Neal y que derrotaría a LeBron James en un uno contra uno “al 100%”. Pero lo peor, más allá de algunos comentarios que resultan cómicos, han sido las referencias a LaMelo Ball y la nueva estrella del equipo, Brandon Miller (número 2 del último draft), de los que sugirió que eran peores jugadores que él, o los comentarios sobre los pívots Mark Williams y Nick Richards, a los que también consideró inferiores a él. Además, dejó otros posts extraños como uno con un simple “soy Dios”.
Mientras sus compañeros de equipo rompían lazos con él en las redes, la prensa de Charlotte aseguraba que en los Hornets había verdadera preocupación por la situación personal (sobre todo en lo relacionado con su salud mental) de Jones, que no se dejó por los entrenamientos voluntarios del equipo, algo que un jugador en su situación siempre suele hacer. Jones no ha encontrado todavía un lugar estable en la rotación de los de Steve Clifford pese a que fue número 19 del draft en 2021 (y pese a que los Hornets dieron una primera ronda protegida para subir hasta ese puesto y hacerse con él).
Tras su ya famosa intervención en septiembre, tuvo que salir a explicar que no estaba “drogado o intoxicado” y que solo estaba “disfrutando de la noche” en su piso. Después entró al trapo de preguntas de usuarios y ahí es donde dejó los comentarios sobre Shaq, LeBron y las estrellas jóvenes de los Hornets, LaMelo y Miller: “He tenido mejores porcentajes que esos tíos desde que salí del útero y ninguno de los dos me puede defender, así que aprended más de baloncesto antes de cuestionarme por aquí”. Rod Boone, periodista del Charlotte Observer, aseguró que el futuro de Jones en la franquicia era “complicado”. En dos temporadas apenas ha promediado 2,7 puntos y 2 rebotes en 9,1 minutos. En la última Summer League tuvo un buen desempeño, incluido un notable trabajo defensivo contra Victor Wembanyama, pero ahora las cosas parecen haberse complicado mucho para un pívot físico (2,11) pero muy verde que no jugó al baloncesto hasta los 15 años, después de crecer mucho de golpe, y que está muy por detrás en la rotación interior de los Hornets, incluso antes de estos jaleos, de jugadores a los que ha criticado como Mark Williams (número 15 del Draft 2022) o Nick Richards.