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La presencia española más baja en la NBA en 18 años

Solo tres jugadores de nuestro país iniciarán la liga norteamericana: Santi Aldama, Usman Garuba y un Ricky Rubio sin fecha de retorno.

Ricky Rubio, base de Cleveland Cavaliers, ante Chicago Bulls en febrero de 2023.
DAVID MAXWELLEFE

La NBA 2023-24 tendrá de nuevo presencia española. Santi Aldama (Memphis Grizzlies), Usman Garuba (Golden State Warriors) y Ricky Rubio (Cleveland) son nuestros representantes en una Liga norteamericana que ya se ha acostumbrado a nuestro acento: es la 23ª campaña seguida con al menos un jugador de nuestro país. Una tendencia que abrió Fernando Martín en 1986 y que se consolidó en el siglo XXI con el desembarco de Pau Gasol en 2001 en Memphis. El de Sant Boi abrió un camino que siguieron otros 16 jugadores más (17 si contamos al ya nacionalizado Lorenzo Brown) y que tuvo su máximo esplendor en la temporada 2016-17 con una decena de internacionales (11 con Brown).

Sin embargo, tras tocar el cielo se comenzó un lenta declive que ha llegado a su punto más bajo esta temporada con tan solo tres jugadores, la peor representación en 18 temporadas. La última vez que hubo tan pocos españoles fue en la 2005-06 cuando Pau arrancaba su quinto curso en Memphis y Calderón debutaba en Toronto Raptors. Raúl López dijo adiós en el verano de 2005 a Utah Jazz y a una aventura norteamericana que duró dos años, el último truncado por una grave lesión en la rodilla izquierda en febrero en el Staples Center (actual Crypto.com Arena) frente a Los Angeles Lakers.

Presente en la NBA

Pero no es solamente la más baja, sino también la que más dudas despierta. Solo Santi Aldama (22 años y 2,11 m), en su tercera temporada en Memphis, tiene asegurada su regularidad en pista en los Grizzlies, mayor ahora por la lesión de Steven Adams. El neozelandés se operará de la rodilla y estará de baja toda la temporada. Los otros dos, Garuba y Ricky, son una incógnita.

Garuba (21 años y 2,03 m) firmó un contrato de dos vías (Two-Way) con Golden State tras ser traspasado de Houston a Atlanta y desde Georgia a Oklahoma. Los Thunder le despidieron. Con este acuerdo, el ala-pívot de Azuqueca de Henares dividirá su curso entre los Santa Cruz Warriors de la Liga de Desarrollo (G-League) y una NBA en la que podrá jugar 45 días, pero no los playoffs. Todo ello por cerca de medio millón de dólares y la oportunidad de demostrar que tiene hueco en el mejor campeonato del mundo.

Rubio (33 años y 1,88 m), por su parte, debería iniciar su 13ª campaña en Estados Unidos. Y decimos debería porque no se sabe si lo hará. El base afronta el segundo de los tres años de contrato que firmó con Cleveland en 2022 por 6,1 millones de dólares, pero por el momento no hay una fecha clara para verle de nuevo sobre una cancha tras dejar la Selección en agosto para cuidar su salud mental.

Futuro en la NBA

Y, mientras todo esto pasa en el presente, el baloncesto español mira a un futuro que parece muy prometedor después de hacerse con el oro en el Mundial Sub-19 este verano. Izan Almansa (18 años y 2,08 m) y Baba Miller (19 y 2,11), dos de los integrantes de esa Selección, apuntan a la primera ronda del draft 2024, según cuatro previsiones (NBADraftroom, NBADraft, Bleacher Report y ESPN). Almansa, actualmente con Ignite de la G-League, es el que mejor pinta tiene para la gran noche de los novatos: le colocan siempre en las posiciones de lotería (del 1 al 14). En esas predicciones también aparece Aday Mara (18 años y 2,21 m), el unicornio español, que pivota entre la lotería del draft y la segunda ronda a la espera de ver cómo se desarrolla su curso en UCLA. La ESPN también hace un hueco a Juan Núñez (19 años y 1,92 m) antes de la segunda ronda.

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