La noche más especial de Doncic: ojos vidriosos, autógrafos...

El WiZink Center recibió por todo lo alto al hijo pródigo. Luka Doncic se sintió como en casa desde la llegada, cuando fue recibido por un grupo de aficionados que ya apuntaban la tendencia de la noche: más camisetas de Dallas con el dorsal 77 en las gradas que del Real Madrid. Fue un baño de masas al que correspondió el esloveno, que no dudó en pararse varios minutos a firmar autógrafos a pie de grada al acabar el calentamiento.

Con la presentación de los equipos llegó el momento más emocionante de la noche. En los videomarcadores pusieron un vídeo con imágenes de Doncic con el Real Madrid y los Dallas Mavericks. El Palacio rompió en aplausos cuando la megafonía anunció a “uno de los nuestros”. Con ojos vidriosos, Luka dedicó unas palabras: “No sé qué decir, es un día muy especial para mí. Viendo a mis excompañeros, ex entrenadores, la gente con la que estuve tantos años. Y también a todos vosotros. Muchas gracias”. Antes de empezar el encuentro, Florentino Pérez, que estuvo acompañado en primera fila de Dejan Bodiroga, Jorde Garbajosa y Antonio Martín, le entregó la insignia de oro y brillantes del club a un jugador que ya es leyenda del equipo blanco.

Doncic no estuvo mucho en cancha. Una distensión en el gemelo le hizo tener minutos controlados: cinco minutos en los que anotó 9 puntos con un 3 de 5 desde el triple. Pero su participación no acabó ahí, durante el descanso entre el primer y segundo tiempo, recibió una réplica de la Euroliga que ganó con el Madrid en 2018. Junto a él, excompañeros como Felipe Reyes, Anthony Randolph, Trey Thompkins, Novica Velickovic... Todos ellos iban ataviados con sus camisetas de jugadores, con su nombre y su dorsal. Doncic estaba a perplejo porque no pensaba que era para él.

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