Felicidad y calma en los Lakers: LeBron extiende su contrato
El alero, pese a los rumores, se compremete con los angelinos por dos años extra y 97,1 millones de dólares más. Se convierte en el jugador mejor pagado de la historia.
Se acabó uno de los culebrones del verano NBA: LeBron James no se moverá de los Lakers el próximo verano. El alero de 37 años, que debutó en la NBA con 18 y 303 días, tenía contrato para la próxima temporada (por 44,5 millones) y estaba ya en disposición de firmar una extensión de dos años más con los Lakers. No hacerlo habría metido en una situación de mucha presión a los angelinos, que sin embargo no tienen nada que temer: Adrian Wojnarowski (ESPN) adelantó que la nueva extensión será por dos temporadas (2023-25), a cambio de 97,1 millones de dólares más y con una player option en manos del jugador para la segunda temporada, 2024-25.
Así que LeBron tiene contrato asegurado por dos temporadas y decidirá él si se acoge a la tercera, que puede ser la de la llegada de su hijo Bronny a la NBA. El alero, que tendrá entonces 39 años, ha reconocido que compartir camiseta con su hijo al menos una temporada sería uno de los pocos sueños que le quedan por cumplir en una pista de baloncesto. Otro llegará, si no pasa nada raro, durante el próximo curso: se convertirá en el máximo anotador de la historia de la NBA cuando supere (las cuentas cuadran salvo lesión grave) a Kareem Abdul-Jabbar. Lo hará además con, como el mítico pívot, la legendaria camiseta púrpura y oro de los Lakers. Con ella, LeBron lleva cuatro temporadas (y un anillo, ganado en 2020). Si cumple su contrato, serán siete en total en L.A. Las mismas que su primer tramo en Cleveland Cavaliers (2003-2010).
La extensión incluye un trade kicker del 15%: LeBron se llevaría ese porcentaje de su salario (a costa de su nuevo equipo) si es traspasado. Y pone al jugador en un total ya de 532 millones de dólares garantizados solo en contratos con franquicias NBA. El tope histórico, por delante con este nuevo acuerdo de Kevin Durant. La cláusula anti-traspaso no se podía añadir por ser una extensión y no un nuevo contrato. En todo caso, LeBron no puede ser traspasado durante la próxima temporada, 2022-23, porque su subida de sueldo en el segundo año de la extensión es superior al 5%. La firma será por dos años porque no era posible un contrato más largo ya que ese es el tope para jugadores con 38 años o más al final del contrato en vigencia en el momento de la extensión.
La pasada temporada, LeBron promedió 30,3 puntos, 8,2 rebotes y 6,2 asistencias. Pero solo pudo jugar 56 partidos. Sus lesiones, las de Anthony Davis y los problemas de adaptación y química de Russell Westbrook provocaron un desastre absoluto en unos Lakers que se quedaron sin playoffs. Ahora, LeBron une su destino al de Anthony Davis, que también tiene contrato hasta 2025 con una player option en la última temporada. Y los Lakers pueden operar desde una situación de mayor estabilidad y sabiendo que tendrán más de 20 millones de dólares, en principio, en margen salarial en el verano de 2023. Si Russell Westbrook no es traspasado antes, será agente libre entonces. Y si Kyrie Irving no llega antes, será el momento de ver cuántas ganas tiene de verdad, como se rumorea, de jugar en los Lakers y reunirse de nuevo con LeBron. El base, cuyo futuro en los Nets es como mínimo oscuro, también será agente libre el próximo verano. Por ahora, los Lakers han comprobado que tienen la confianza de LeBron a pesar del desastre de la última temporada. Ahora habrá que ver qué pasos dan para maximizar esta última cabalgada del Rey, que busca su quinto anillo de campeón.