El diciembre negro de Vasilije Micic
El serbio se cae completamente de la rotación de los Thunder, muy poblada y con roles cada vez más definidos en los puestos exteriores.
¿Alguien se acuerda de Vasilije Micic? El base serbio, uno de los mejores jugadores del último lustro en el baloncesto europeo, y ya un histórico de la Euroliga tras su etapa (2018-23) en el Efes (dos títulos, un MVP, dos MVP de la Final Four, una vez Máximo Anotador), cumplirá el 13 de enero 30 años. Y sí, sigue en Oklahoma City Thunder. Pero cada vez es más difícil caer en la cuenta. Micic solo ha jugado 23 minutos en diciembre, divididos en dos partidos. Y solo ha participado en total, un dato malo y que además va a menos, en 10 de los 26 que han disputado los Thunder. En ellos promedia 12,2 minutos. Pocos minutos en menos de la mitad de los partidos de su equipo, una combinación nefasta.
Los Thunder, claro, van de maravilla. Son segundos del Oeste (18-8 ahora), y están culminando una reconstrucción forzada por la salida en el verano de 2019 de Russell Westbrook y Paul George. La piedra angular es el extraordinario base canadiense Shai Gilgeous-Alexander (25 años), pero el unicornio Chet Holmgren (21) solo ha necesitado dos meses de año rookie (se perdió la temporada 2022-23 por lesión) para redefinir totalmente las jerarquías y el formato del equipo. A partir de Shai (30,7 puntos, 5,8 rebotes, 6,3 asistencias y 2,8 robos por partido) y Chet (17,2, 7,9, 2,5 y 2,7 tapones) los Thunder se han reorganizado. Jalen Williams (22) está encontrando la forma de encajar como tercera espada mientras que Josh Giddey (21) está algo más desplazado, por rol y por sensaciones. Y no sería descabellado que acabe en el mercado porque los Thunder pueden buscar un gran golpe de efecto o, simplemente, gestionar sus bazas toda vez que no van a poder firmar grandes extensiones a todos los que están aún en contrato rookie. Y Giddey está cada vez más atrás en la escala de prioridades.
Los Thunder, por lo tanto, son un equipo dispuesto a hacer cosas grandes ya, no en el futuro. Y su entrenador Mark Daigneault (solo 38 años) tiene muy claro cómo quiere jugar y qué piezas son las fundamentales en esa propuesta. Y ahí no ha entrado Micic y, con su equipo lanzado y una rotación de guards amplia y cada vez más definida, va a tener difícil hacerlo salvo que suceda algo: lesiones, reorganización de roles y minutos por traspasos…
Micic, después de darle vueltas y flirtear con el cambio de aires durante un par de veranos, se decidió a probar en la NBA ahora, en un año en el que no fue al Mundial y en el que se preparó porque su equipo, precisamente, apuntaba alto. Hasta entonces, había rechazado la idea de cambiar al campeón de la Euroliga por un proyecto en reconstrucción y todavía perdedor. Hoy, esa exigencia es una de las razones por las que está básicamente fuera de la rotación. Fue número 52 del draft en 2014 y sus derechos acabaron en los Thunder, que este verano le dieron 23,5 millones de dólares por tres temporadas. Una media de 7,8 que supone más del doble de lo que ganaba en el Efes y dos años totalmente garantizados. El tercero (temporada 2025-26) es una opción de equipo.
La cuestión es que Shai es el rey sol en OKC, un base y jugador franquicia que absorbe casi 35 minutos por noche. Giddey sigue siendo titular y es un escolta con mucho de base que se adapta como puede a formar pareja exterior con Shai. A partir de ahí tendría que aparecer el hueco de Micic, pero las cosas no han sido tan sencillas. En primer lugar, porque la necesidad de tiro exterior da muchos minutos al escolta Isaiah Joe (24 años). Pero, sobre todo, porque los Thunder subieron al diez del último draft cuando vieron que seguía a tiro Cason Wallace, base de la Universidad de Kentucky. Un jugador (20 años) que está gustando mucho en su estreno en la NBA y que hace un poco de todo en ataque con mucho potencial defensivo. Justo lo que hace falta como base suplente en un equipo como los Thunder (y casi en cualquiera). Joe juega 20,5 minutos por noche y Wallace, 21,7.
Así que la cosa (y eso con Lu Dort jugando más como alero que como escolta) se comprime demasiado para Aaron Wiggins, Tre Mann (base de 22 años que fue número 18 del draft en 2021)… y, claro, Micic. El serbio se ve con 30 años y pedigrí de leyenda de la Euroliga en una situación indeseable, obligado a pelear por migajas en la rotación… y solo cuando estas siguen en el plato, algo que casi no ha sucedido en diciembre. Si los Thunder se mueven, su contrato puede ser uno de los que usen en un posible traspaso. Eso, ya se sabe, puede abrir nuevas oportunidades o alienar definitivamente a un jugador que esperaba más, obviamente, y que por ahora no está teniendo suerte en la NBA. Veremos qué le depara el futuro… y dónde.
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