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De Simmons a Beasley: los grandes agentes libres del mercado NBA que aún están sin equipo

La temporada comienza con algunos clásicos de la NBA sin equipo. Russell Westbrook, que decidió no seguir en los Nuggets, encontró acomodo en los Kings.

De Simmons a Beasley: los grandes agentes libres del mercado NBA que aún están sin equipo
Erik Williams
Juanma Rubio
Nació en Haro (La Rioja) en 1978. Se licenció en periodismo por la Universidad Pontificia de Salamanca. En 2006 llegó a AS a través de AS.com. Por entonces el baloncesto, sobre todo la NBA, ya era su gran pasión y pasó a trabajar en esta área en 2014. Poco después se convirtió en jefe de sección y en 2023 pasó a ser redactor jefe.
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Llega una nueva temporada en la NBA y, una vez más, no todos los jugadores que pelean por ello encuentran acomodo en alguna de las treinta franquicias. Cuando los equipos reducen sus plantillas y se ponen definitivamente en el formato de regular season, los hay que se quedan sin hueco en una lista que incluye a meritorios, aspirantes que saltan a la G League… y también a algunos ilustres que van pasando a las filas de los que van teniendo toda o casi toda su carrera NBA ya en las espaldas. Esta es una lista de algunos jugadores que, por ahora, no tienen sitio en la NBA 2025-26. Algunos, nombres de primera magnitud que han preferido, por ahora, esperar a que se presente una oportunidad más antes de marcharse fuera de Estados Unidos.

BEN SIMMONS. Con solo 29 años, hace mucho que nadie espera grandes cosas del número 1 del draft de 2016, un jugador que parecía llamado a ser muy importante, incluso generacional, y acabó teniendo una muy mala carrera por culpa de, sobre todo, las lesiones y su terrible problema con el tiro exterior: cinco triples anotados en nueve años. En su último equipo, los Clippers, tampoco dejó grandísimas noticias y parece que ya nadie apuesta por él ni siquiera con un contrato pequeño y casi en una condición de meritorio que es, desde hace tiempo, la única que le queda en una NBA de la que se dijo en verano que estaría planteándose alejarse. Por ahora, es la propia liga la que no cuenta con él.

MARKELLE FULTZ. Un año después de Ben Simmons, en 2017, también fue número 1 del draft, también seleccionado por los Sixers. Una extraña lesión de hombro frustró los primeros años de una carrera marcada por los problemas físicos. Después, intentó recuperarse con Orlando Magic, y tuvo momentos prometedores. Pero, por ahora, tendrá que seguir buscando una nueva oportunidad. El pasado curso jugó 21 partidos con Sacramento Kings y ahora está sin equipo. Un jugador que podría haber sido una estrella y que tenía, en College, un juego de ataque espectacular, pero que no encontró nunca su verdadero camino en la NBA.

DEANDRE JORDAN. Con 37 años, DeAndre Jordan parece no contar ya para ninguna rotación interior. Un jugador que acabó destacando por puro físico, que fue all star en 2017 y campeón en 2023 como suplente de Nikola Jokic en Denver Nuggers, acabó este verano una vinculación de tres años con los de las Rocosas. Allí eligieron a Jonas Valanciunas como nuevo suplente del tres veces MVP. Mientras, Jordan, buscará hueco en algún equipo que necesite un refuerzo en su rotación interior. Ya le queda poco que ofrecer en pista, pero ha sabido ser también en los últimos años una presencia veterana valiosa. Así que quizá tenga una última oportunidad.

MALIK BEASLEY. El caso más complejo: un tirador que fue muy importante la pasada temporada en los Pistons, donde promedió más de 16 puntos con un 41% desde la línea de tres. En un verano con muy buenas perspectivas (todavía 28 años) como agente libre, su camino se vio alterado por un caso de apuestas que amenazó con destruir totalmente su carrera. La investigación del FBI se cerró sin malas noticias para él, pero ahora es la NBA la que está mirando su caso con lupa. Si tampoco hay sanciones en la liga, Beasley encontrará equipo muy rápido.

BOL BOL. Ya han pasado seis años desde que el hijo de Manute Bol llegó a la NBA. Finalmente, los riesgos por su particular físico (2,21, apenas 100 kilos) han podido más que su potencial como jugador de intimidación y tiro exterior. La pasada temporada, en los Suns, jugó solo 12,4 minutos por partido. Promedió 6,8 puntos y 2,9 rebotes. Antes jugó en Nuggets y Magic, pero en ningún momento ha podido brillar, y ahora le toca esperar una nueva oportunidad.

ALEC BURKS. Un alero con mucha capacidad anotadora, la edad (34 años) no perdona y Burks está sin equipo después de jugar en Miami Heat la pasada temporada. También ha pasado por Jazz, Kings, Warriors, Sixers, Knicks, Pistons… un trotamundos que ha podido exprimir su talento y que quizá puede seguir haciéndolo si en algún momento algún necesito un alero veterano y con capacidad (ya poco más) de sumar unos cuantos puntos desde el banquillo.

JAE CROWDER. Otro caso obvio en el que la edad es el factor decisivo: Crowder fue durante unos años un 3&D muy valorado (defensa, tiro exterior desde las alas) en la NBA. Pero poco a poco, y a medida que su físico iba perdiendo fuelle, también fue perdiendo protagonismo. Finalista de la NBA con los Suns en 2021, pasó después por Bucks y Kings.

KJ MARTIN. Un alero que tiene todavía 24 años y que ha tenido flashes (Rockets, Sixers…) pero no ha conseguido asentarse. Tiene un físico muy poderoso, y explosivo, pero le falta talento, y tiro, para tener continuidad. En todo caso, por su edad podría no tener las puertas del todo cerradas.

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