¿Booker, Durant y Beal? Los Suns buscan un golpe de efecto

El mercado de la NBA se calienta. Una vez terminada la temporada de la NBA, con los Nuggets disfrutando del primer anillo de su historia, esto es el pan de cada día. Los equipos afilan sus armas y piensan en la temporada que viene, buscan la mejor manera de mejorar sus plantillas, se deshacen de productos teóricamente tóxicos e intentar pensar en su propio proyecto, ya sea a corto, medio o largo plazo. Por eso es típico que ahora se multipliquen los rumores, siempre inherentes a la mejor Liga del mundo. Algo que ayuda a la propia competición, con filtraciones constantes que favorecen a una narrativa inacabable, que viene a decir que esto no para nunca, que todo sigue su curso y que los tuits de Adrian Wojnarowski (ESPN) y Shams Charania (The Athletic), entre otros, impiden que la emoción se acabe. Y en esas estamos ahora mismo.

A menos de una semana para que tenga lugar el draft (será la noche del jueves 22 al viernes 23 de junio), los rumores se intensifican hasta explotar durante el evento, en el que se realizan muchos intercambios. Los tuits se disparan ese día. Y antes, toca el calentamiento. En concreto, y en estos momentos, en torno a una figura muy particular: la de Bradley Beal. Los Wizards estarían dispuestos a deshacerse del jugador y la propia estrella, que tiene una cláusula antitraspaso (muy típica en jugadores de una categoría superior), también vería con buenos ojos recalar en un nuevo destino. En este punto, habría dos finalistas para hacerse con el escolta: Miami Heat y Phoenix Suns. Así están las cosas.

De momento, lo que se conoce es que los Heat buscan al traspaso sin soltar a Tyler Herro y metiendo en el mismo a Kyrle Lowry, Victor Oladipo y rondas del draft. Por parte de los Suns, no se conocen los términos de la negociación. Tienen que cortar (o meter en el intercambio) a Chris Paul antes del 28 de junio para no pagarle los 30 millones que tiene estipulados en su contrato, de los que sólo son garantizados algo más de 15. Y tienen una situación contractual complicada, ya que Devin Booker y Kevin Durant cobrarán 36 y 47 millones el próximo curso y están atados a la entidad hasta 2028 y 2026 respectivamente. Por lo tanto y si se da el traspaso, los Suns (que podrían soltar a DeAndre Ayton) estarían obligados a pagar una cantidad ingente de dinero en el impuesto de lujo y, además, llenar el banquillo y la intendencia de multitud de contratos mínimos. Teniendo en cuenta que la profundidad de la plantilla ha sido un problema sostenido esta última temporada, especialmente desde la adquisición de Durant.

Ahora, toca esperar a ver cómo se desarrollan los acontecimientos. Beal es una estrella con un contrato enorme (firmó en julio de 2022 una extensión de 251 millones en tres temporadas) que ha arrastrado problemas físicos en los últimos años (tiene 29) y no ha llegado al nivel que prometía de 2019 a 2021, cuando promedió más de 30 puntos por noche en dos temporadas consecutivas. En las dos últimas apenas ha superado las 23, convirtiéndose en una estrella que no ha mostrado del todo su luz. Compartió equipo con Durant y Booker en la selección de Estados Unidos y el propio Durant se refirió a él positivamente en diciembre, cuando todavía vestía la camiseta de los Nets. Pero las cifras tienen que cuadrar, en teoría los Heat tienen más argumentos y es complicado que acabe, a priori, en los Suns. Por mucho que los Wizards quieran deshacerse de Beal y de su contrato. Veremos.