Sola: “A la afición no se les puede pedir nada: siempre está ahí”

Si este jueves fue el turno de las chicas, este viernes les toca a los chicos. El Movistar Estudiantes abre en Barris Nord (21:00 horas, LaLigaSportsTV) ante el Força Lleida, uno de los candidatos al ascenso, su segunda temporada en la LEB Oro tras el chasco de la pasada: segundos en la fase regular por detrás del Covirán Granada, el Bàsquet Girona de Marc Gasol le privó de obtener el segundo billete para la Liga Endesa en la Final Four.

Un duro palo que ha removido todo en el club. Arriba y abajo. En el plano institucional, la adquisición de la institución por parte de Carlos Avenza a través de la ampliación de capital por cinco millones de euros parece cuestión de tiempo. Mientras que en el deportivo, la remodelación fue completa.

Salió Diego Epifanio, Epi, dirección Coruña para dejar paso a Javier Rodríguez. El gallego (1979) llega desde el Surne Bilbao, donde fue asistente de Álex Mumbru. Y con su aterrizaje, un total de siete caras nuevas: los bases Hansel Atencia y Toms Leimanis, el combo Mark Hughes y el tirador Paul Jorgensen. Por dentro, Sean Smith, Karamo Jawara, Leo Demétrio se unirán a la experimentado Kevin Larsen y al internacional búlgaro Emil Stoilov.

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También continúan tres jóvenes canteranos: los oro europeo Sub-20 Héctor Alderete y Rubén Domínguez y el gran capitán Adams Sola. Con solo 22 años, el escolta de Leganés es el más veterano del grupo con seis temporadas en el club y, por eso, AS habló con él antes de comenzar un curso complicado en los estudiantiles medirán fuerzas con MoraBanc Andorra y el San Pablo Burgos, dos nobles los últimos años de la Liga Endesa, y rivales de mucho nivel como el Força Lleida de Michael Carrera y Juanin Marcos (ojo con el base, un increíble jugador), el UEMC Valladolid, el Leyma Coruña, el Zunder Palencia...

“Estamos más preparados y el objetivo sigue siendo ascender”

Lo primero de todo, ¿qué tal ha ido el verano?

Muy bien. Ha sido más largo que otras veces porque hemos empezado más tarde, así que he tenido tiempo para descansar, entrenar… un poco de todo.

¿Entrena mucho durante el verano?

Intento no pararme del todo, pero tampoco me mato porque sé que luego la temporada es muy larga y hay que descansar. Aprovecho para ejercitar cosas más técnicas

22 años, seis temporadas en el Movistar Estudiantes y ya capitán. ¿Se siente tan veterano?

Por un parte, sí y por otra no. Tengo aún 22 años, pero claro pienso y he pasado ya muchas cosas aquí, he visto muchas cosas, muchos años, temporadas de todo tipo.

El Movistar Estudiantes tiene siete caras nuevas, muchos cambios que es algo que usted ya ha visto en más de una ocasión, pero ¿se acostumbra a tanto baile de compañeros?

Sí. Al final ya me he acostumbrado. Ha habido muy pocos años que de una temporada a otra hayan cambiado muy pocos jugadores.

¿Y qué tal los nuevos?

La verdad que muy bien. La impresión es muy buena. Veo a un equipo con mucha hambre. Somos todos jóvenes, muy trabajadores… La temporada es muy larga y pueden pasar muchas cosas, pero el equipo pinta muy bien.

Pancho Jasen, director deportivo, me dijo que habían hecho ustedes un núcleo muy bueno.

Sí, sí. Nos llevamos todos muy bien. Al ser todos más o menos de la misma edad podemos hacer muchas cosas juntos. Además, son todos gente muy tranquila. Vamos todos juntos, no hay ninguno que esté separado.

Y alguno que usted diga ‘va a sorprender a la afición’.

Por supuesto, Sean (Smith). Va a dar mucho espectáculo. Eso seguro. Y, luego, el resto va a dar un nivel muy bueno. No sé si habrá alguno que destaque: vamos a ser un equipo muy regular, que todos van a tener su oportunidad y creo que eso es muy importante en una temporada tan larga.

El estilo de juego, en comparación a la pasada temporada ha cambiado con Javier Rodríguez en el banquillo: es más rápido, más agresivo en defensa.

Sí. La idea que tiene Javi es la de jugar muy rápido. Sistemas muy directos. Pocos segundos. Tirar cuando tengamos oportunidad. El equipo, como le he dicho, es joven y podemos correr y aguantar mucho.

¿Se siente cómodo en este sistema?

Sí, sí. Me siento cómodo porque la defensa es agresiva. Apretamos y ahí yo me siento cómodo. La transición también, buscando tiros abiertos, penetraciones… Me gusta el sistema.

¿Qué espera de la temporada?

Quiero seguir creciendo como jugador y aportar cada vez más cosas al equipo. Mejorar y que al final de temporada consigamos ascender.

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No se habla mucho de la palabra ascenso este año, pero es el objetivo, ¿no?

Siento que el año pasado hubo mucha presión y creo que en este, en principio, hay menos. Pero nosotros también nos metemos presión porque somos el Estudiantes y puedes decir que Andorra, Burgos tienen más presupuesto, pero el Estudiantes está obligado a estar en ACB. Sabemos que es una Liga dura que es muy difícil subir, pero creo que estamos más preparados y el objetivo sigue siendo ascender, obviamente.

Han descendido el Andorra y el Burgos, el año pasado aterrizó Marc Gasol. Les tocan todas las chinas…

Sí, sí. La verdad es que el año pasado tuvimos mala suerte con lo de Marc porque no te esperas que de repente llega un campeón de la NBA a jugar en LEB, justo el año en el que estábamos nosotros. Pero tampoco es una excusa. Al final no hicimos las cosas bien: teníamos que haber subido y no lo conseguimos. Esta temporada tanto Burgos como Andorra van a dar mucha guerra. También habrá otros equipos que van a estar bien. Va a ser uno de los años de la LEB más competitivos, pero nosotros tenemos que estar arriba sin duda.

Como dice usted hay otros buenos equipos como el Lleida, contra los que debutan este viernes, el Valladolid, el Coruña…

Son equipos que van a estar arriba. No será fácil. No va a haber ningún equipo que suba con dos derrotas porque la temporada es muy larga y todos perderán partidos. Hay que estar fuertes, ser más sólidos fuera de casa de lo que fuimos la temporada pasada y por ahí estará la clave para saber si ascendemos o no.

Hablando de la temporada pasada. A usted se le vio pletórico en los dos primeros tramos del curso, luego hubo un pequeño bajón. ¿A qué se debió?

Como le digo, las temporadas son muy largas. A partir de la primeras jornadas empecé a jugar muy bien y al final de temporada sí que es cierto que me costó un poco más. No sé si por todo lo que pasaba en el equipo, con cambio de entrenador, un poco más de presión porque se acercaba el final. Nervios también. Es complicado. También era mi primer año jugando minutos reales. No estuvo al nivel que me habría gustado en el tramo final. Voy a tratar que este año sea de menos a más

¿Qué mensaje le puede enviar a la afición?

Pedir no se les puede pedir nada porque siempre está ahí. A veces nos da más de lo que nos merecemos. Quiero decirles (a los aficionados) solo que sigan confiando en nosotros, que sigan apoyándonos como hasta ahora como han hecho todos estos años. No sé si subiremos o no, pero creo que va a ser un buen año para todos y van a sentirse orgullosos del equipo que van a ver.

El rival, el Força Lleida, por Javier Rodríguez

“A nivel individual tiene tres jugadores determinantes: Juani Marcos, Vasilije Vučetić y Michael Carrera. Pero su fortaleza es el grupo: es un equipo que juega bien, con buenos automatismos, se pasan bien el balón y juegan bien sin él. Es un equipo muy bien entrenado, que sabe a lo que juega y mantiene las señas de identidad del año pasado. Es complicado de jugarle, porque juegan abiertos, con muchos tiradores, muy fluidos. Intentaremos parar ese juego”.