El Movistar Estudiantes se redime

El Movistar Estudiantes se quitó el mal sabor de su infausto estreno de temporada en Lleida. Sacó músculo, potencial ofensivo, rapidez en las transiciones para doblegar al Club Ourense Baloncesto (104-86). Los ingredientes con los que quiere cocinar Javier Rodríguez el sistema colegial… aunque hubo que esperar hasta el huracán del tercer cuarto para verlo.

En esos diez minutos, los ramireños crearon el pánico entre los gallegos, que se vieron completamente superados por el acierto exterior de su rival (5 de 8) y los puntos sin casi segundos en la posesión. El parcial habla por sí solo: 24-0 en tan solo 5 minutos, del 55-48 al 79-48 con Kevin Larsen de punta de lanza. 30-6 en 8 minutos. El pívot danés cerró con 18 puntos (2 de 3 desde el triple), 6 rebotes y 2 asistencias para 25 de valoración. Junto a él, Karamo Jawara (10) y Hansel Atencia, que cogió el timón por la acumulación de faltas de Leimanis y fue de menos a más. Hizo 17 tantos y repartió 5 asistencias. Desde fuera (3 de 6) y con exquisitas penetraciones.

Con ese +31 el duelo se cerró y Rodríguez se permitió dar descanso a sus grandes nombres como Larsen y Jawara que no pisaron más en la cancha. Atencia solo un poco cuando el enfrentamiento se puso un poco loco. Y dio minutos a Héctor Alderete, que requiere mimos para coger confianza; a Emil Stoilov, el futuro, y a un Leo Demétrio que necesita convencerse a él y al resto de que aún quedan muchos puntos en sus manos.

A pesar de esa aparente facilidad, de esa gran ventaja, los madrileños tuvieron que sudar hasta el descanso. Aunque de arranque parecía que no. El Estu salió disparado ante el recién ascendido. Con Jawara y Jorgensen (genial actuación) como novedades en el cinco inicial con respecto a Barris Nord, pusieron el +8 de ventaja (19-11) en apenas cinco minutos. Todo fluía… menos la defensa. Los cambios de asignación tras bloqueo eran un filón para los visitantes en la primera parte, que buscaban una y otra vez ese punto ciego. El acierto exterior del excanterano del Madrid Paco del Águila empató el duelo a 27.

Larsen tuvo que salir al rescate. Con Aboubacar haciendo suya la zona, el nórdico tiró de galones y seis puntos seguidos suyos y cuatro de Atencia más la catarata de pérdidas del Ourense (10 al descanso) permitían al Movistar irse 6 arriba (48-42) tras el segundo cuarto. Luego llegaría la tormenta y la primera del curso superando la barrera de los 100. Aún queda mucho margen de mejora, pero no hay mejor manera de recuperar confianza.