Aday Mara deja en el aire su futuro

Aday Mara ha concluido su primera temporada en Estados Unidos. Lo hizo hace ya unas semanas, el último partido fue el 14 de marzo, cuando anotó 2 puntos y 3 tapones en la derrota contra Oregón por 68-66. El pívot español llegó el pasado verano a UCLA, una de las universidades con más tradición de baloncesto, especialmente en la posición de cinco (por allí pasaron jugadores como Kareem Abdul-Jabbar o Bill Walton), con unas expectativas muy altas. Su participación con los equipos de categorías inferiores de la Selección los dos últimos años, y algunos ratos en los que ya había conseguido destacar en la ACB con el Casademont Zaragoza, tenían enamorados a los ojeadores estadounidenses. Tanto que en las previsiones para el draft de este año llegó a estar posicionado entre las cinco primeras elecciones.

Pero la realidad ha sido muy distinta. Mara ha tenido un año discreto, muy flojo y con dificultades para incluso asentarse en la rotación. Ha jugado 28 partidos, pero sus medias son muy escasas: 9,5 minutos, 3,5 puntos, 1,9 rebotes, 0,5 asistencias y 0,7 tapones. En el último mock draft de ESPN, publicado hace dos días, no aparece por ningún sitio. Parece claro que la apuesta universitaria de Mara, por el momento, no ha salido bien.

El jugador ha hablado en The Bruin Report, un medio especializado en los equipos de la Universidad de UCLA, sobre su futuro allí. El español no ha dejado claro si quiere continuar o no en la universidad de Los Ángeles: “Tenemos que ver. Tengo que regresar a UCLA y reunirme con Mick Cronin (su entrenador), ver qué piensa él y qué pienso yo sobre la temporada. Los minutos serán importantes, quién estará en el puesto de pívot, quién va a venir al equipo, cómo van a ser los entrenamientos. Mi prioridad ahora mismo es ir al gimnasio y poder estar más fuerte para la próxima temporada. Quiero sentirme más cómodo y jugar con más contacto”. Hay que recordar que Cronin se ha referido durante la temporada a su problemas defensivos y a que podía mejorar su capacidad física.

Otra cosa de la que ha hablado Mara es de las diferencias que ha encontrado entre el baloncesto universitario estadounidense y el que se juega en FIBA. “El mayor cambio fueron las reglas, los árbitros, el estilo de juego... No creo que sea más físico que en FIBA, pero en defensa se nota. En FIBA podemos usar las manos, pero aquí los contactos deben ser perfectos o te pitarán falta. Después de los primeros meses logré no hacer tantas”, explica.

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