Mike James vuelve a criticar a Vitoria: “Es lo peor”

Mike James, estrella del Mónaco y uno de los mejores jugadores de la Euroliga, nunca deja indiferente cuando se pronuncia. Da igual el tema y la plataforma en que lo haga. Esta vez ha sido en una entrevista en un podcast de SKWEEK. Allí ha hablado de varios temas, algunos relacionados directamente con el baloncesto y otros más con su vida personal. Entre estos últimos le han pregunta por las ciudades europeas en las que ha vivido durante su periplo profesional en el Viejo Continente, un total de nueve en siete países distintos: Croacia, Israel, Italia, Grecia, España, Rusia y Mónaco.

¿Cuál es su lugar favorito para vivir en Europa? Esa fue la pregunta concreta que le hicieron y su respuesta fue extensa, rememorando los pros y los contras de las últimas cinco ciudades en las que ha vivido: Vitoria, Atenas, Milán, Moscú y Mónaco. Y algo que no es nuevo, ha vuelto a dejar a la capital vasca en mal lugar: “En Baskonia fue terrible, Vitoria es lo peor. Ni siquiera sé si realmente es lo peor, pero yo tenía unos 24-25 años, un hombre soltero en Vitoria. Literalmente para mí no había nada que hacer. Fue lo peor. Realmente no sé si es tan mala como ciudad porque tiene buenos restaurantes. Pero cuando estuve allí no daban películas en inglés, no había demasiadas cosas para mí si he de ser honesto. Y se enfadan cada vez que lo digo, pero es la verdad”.

En el otro extremo de su ranking particular coloca a Atenas, de la que es un enamorado: “Me encantaba Atenas porque entonces estaba soltero, con 26-27 años. Y había de todo para hacer. Creo que me excedí al principio. Me sorprende que Dimitris Giannakopoulos no lo dijera porque al principio me excedí un poco. Recuerdo que se acercó a mí y me dijo: ‘Mike, has estado saliendo todos los días’. Yo le contesté que estaba emocionado con la ciudad. Realmente me encanta Atenas”. En cuanto a las tres últimas, también dio su opinión: “Milán también estuvo muy bien, un poco lluviosa. Me encantó Moscú, no sé cómo suena eso, pero me encantó estar allí, fue increíble. Y, obviamente, disfruto mucho aquí en Mónaco, simplemente teniendo un poco más de calma y tranquilidad”.

Sus problemas con la NBA

En la entrevista también hablaron de partes de su carrera más relacionadas con el baloncesto en sí, y una de las más interesantes fue su relación con la NBA. Escasa, porque sólo ha jugado allí durante dos temporadas en las que estuvo en tres equipos, Suns y Pelicans en la 2017-18 y Nets en la 2020-21, disputando apenas 49 partidos de temporada regular en total. Este protagonismo tan pequeño en el baloncesto profesional de su país tiene una razón, según explica el propio base: “Creo que los equipos de la NBA me ven como un riesgo. Cada vez que he hablado con ellos, no yo personalmente si no mis representantes, se piensan que si la cosa no va bien para mí me voy a volver loco y volverme a Europa. Todo el mundo piensa que si no juego lo que quiero me iré. Consideran que me pongo en un papel superior al que quieren darme en el equipo, pero necesito ponerme en ese papel para tener más protagonismo. Tiene que ser un toma y daca entre ambas partes”.

Además de su experiencia personal en las negociaciones con las franquicias, también cree que hay un problema estructural que afecta a los jugadores de sus características: “La NBA está bien, es agradable, pero en realidad no está hecha para gente como yo. Está más hecha para personas de 2 metros que saltan mucho, son buenos en defensa y se quedan en las esquinas parados esperando para tirar triples”. Él, con su 1,85, ha acabado siendo una leyenda de la Euroliga, máximo anotador histórico de la competición.

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