Edy Tavares, el invencible
El pívot caboverdiano Walter Tavares suma un pleno en la Supercopa con 10 victorias de 10 posibles para 5 títulos seguidos desde 2018.
La Supercopa Endesa ha tenido al Real Madrid como el gran ogro durante el último lustro. Desde 2018, en Santiago, el equipo blanco no ha perdido ninguno de los 10 partidos que ha disputado para un resultado final de cinco títulos seguidos. Una fructífera cosecha que le ha elevado por encima del Barça en el ranking histórico: nueve por los seis trofeos conquistados por el conjunto azulgrana, que no levanta la Supercopa desde 2015.
Todos esos títulos tienen un denominador común: Walter Samuel ‘Edy’ Tavares. El pívot caboverdiano (31 años y 2,20 m) aterrizó en el Madrid en noviembre de 2017 por los problemas de lesiones en el juego interior de la plantilla (Kuzmic y Ayón) y dos meses después de que el Real cayera en las semifinales de Las Palmas de Gran Canaria ante el anfitrión, que sería derrotado después por el Valencia Basket. Esa fue la última edición hasta la fecha en la que los blancos se han quedado sin el primer título de la temporada.
“Tengo la misma ilusión a pesar de haber ganado tantas Supercopas seguidas. Es como si fuera la primera. Nuestro objetivo es conquistar el primer título de la temporada”, asegura el africano a los medios del club madridista. “Estoy en un equipo que es insaciable a la hora de ganar títulos: vamos a por todos”.
Tavares ha promediado en esa decena de duelos 7,4 puntos (2,5 de 4,3 tiros de dos), 5,5 rebotes y 2,4 tapones para 12,7 de valoración con una auténtica exhibición en la final del pasado año ante el Barcelona, que le valió para su primer MVP en una Supercopa: 24 tantos, 12 capturas y 5 chapas para 40 de valoración, récord histórico del torneo (34 Tyrese Rice en 2016). Sus 7 tapones en las semifinales de 2019 contra el Fuenlabrada también son tope de siempre en el campeonato.
Las cinco Supercopas consecutivas ganadas por Tavares y el Madrid fueron contra el Barça en la final. Un hecho que no se reeditará en Murcia porque el duelo entre los dos gigantes se producirá en la primera semifinal del sábado (18:30 horas, Movistar+). “Tengo muchas ganas de comenzar, además con el Clásico del baloncesto español. Trataremos de hacer el mejor papel posible para conseguir llegar a la final. Sabemos que la Supercopa es muy importante para nosotros porque nos da mucho más ánimo para empezar la temporada de la mejor forma posible”, continúa el pívot, que llega con poco descanso en sus piernas tras el Mundial de Filipinas, Indonesia y Japón, el primero en la historia para Cabo Verde, que finalizó en el puesto 28 de 32 con solo una victoria en cinco partidos.