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Surne BilbaoBLB
91
GranadaGRA
88
Finalizado

Liga Endesa | 24ª jornada

Pues se ha quedado buena noche... para la permanencia

El Bilbao Basket vuelve a responder ante la exigencia contra un rival directo por la salvación. Todos los resultados le han ayudado esta jornada.

Pues se ha quedado buena noche... para la permanencia
AIOLDiarioAS

No era aquello una fiesta como una semana atrás, donde todo eran sonrisas, velitas a punto de ser sopladas, serpentina, caras de alegría, abrazos y afecto por los 25 años de historia que celebraba el Bilbao Basket. Por entonces casi daba igual el resultado ante el Tenerife. Ahora los rostros eran de gruñones, de frustraciones mal digeridas, hasta algún mal gesto en el banquillo, hasta el punto de que Ponsarnau fue más contundente que nunca en la rueda de prensa postpartido: “El que no quiera estar junto a todo esto, pues fuera. No contemplamos la opción de que nos pueda ayudar alguien si no está preparado para ayudarnos”. La presión era repartida, porque el Granada está en situación límite, pero para los ‘hombres de negro’ caer ante el vicecolista era meterse en la boca del lobo, en un lío gordo... y se mascaba la tensión. Al final, todo quedó en su susto, con un nuevo ejercicio de pico y pala. Tres triunfos y el average con los nazaríes es ya un mundo en este tramo final del campeonato, con sólo diez jornadas por deshojar. Si se gana al Coruña, todos los enemigos directos habrán mordido el polvo en Miribilla. La jornada fue perfecta porque todos los de la parte baja han caído este fin de semana. Un chute de tranquilidad. Lo que se dice un día bisagra que abre la puerta al alivio.

Era, por lo tanto, una ocasión muy propicia para el Surne, con el Granada plagado de bajas, aunque con el fichaje fresco de un Griffin con muy buena pinta. Se rindió homenaje a Rousselle, por los 25 años de historia en el Bilbao Basket, de los que él ha estado en tres. Faltaban otras caras conocidas como Bamforth, Tomàs y Ubal. Y también estaba Silverio, que, con otro contexto con más confianza y tiros, demostró que no es tan mal jugador como en su etapa vasca. Ponsarnau desactivó a Rabaseda y Kullamae, cero segundos, porque en esta nueva era, con más protagonismo para Domínguez y la llegada de Cazalon, se han redistribuido los roles.

Ante tantas fluctuaciones por todas partes, Pantzar y De Ridder, los de siempre, dos clásicos ya con galones por su fructífera estancia en la capital vizcaína, decantaron la balanza. Especialmente el base sueco, un noqueador nato con puños de hormigón, verdadero homenaje a Foreman. Fue un pulso irregular, poco vistoso, en el que el Granada, que no puede especular porque la soga aprieta, peleó hasta donde pudo. Era una oportunidad de reengancharse a la pelea por la salvación, en la que tanto ellos como Coruña se empiezan a ver muy descolgados. Los locales pasaron por diferentes estados de ánimo. Con un 0-9, se puso con 81-78 tras la primera canasta de Valtonen, un triple a 1:52 para acabar. Habían renacido desde un 72-56, de nuevo con mucho barullo bilbaíno en los ataques. Tal vez hicieron lo más difícil. Pantzar tiró de riñones y una entrada suya marca de la casa desafiando a todo y todos, sacó el 2+1 con falta de Valtonen, al que su entrenador, Pin, luego dio un buen toque con eso de que no puede andar entrando y saliendo del banquillo continuamente con faltas tontas. Todo había partido de un rebote ofensivo clave de Hlinason tras un fallo en el tiro de Frey. De todos modos, los de la Alhambra aún no habían dicho su última palabra. Griffin, fichaje de categoría, metió un triplazo: 84-81, a 1:11 para que cayera el talón. Dragic hizo un arabesco con una bandeja y todo parecía decantado a 50 segundo para acabar: 86-81. En los tiros libres, los bilbaínos supieron cerrar un choque más sudado de lo que se esperaba. Todo esto no se entendería sin el juego cada vez más seguro de De Ridder: un triple clave por aquí, un rebote por encima de la chepa del rival por allá, una defensa por ese otro sitio... una navaja multiusos que no perdona una.

Fue un encuentro igualado en su primera mitad, roto por los ‘hombres de negro’ tras el descanso y con un arreón final del Granada que hizo temer lo peor a la sorprendida afición de Miribilla. Demasiada ansiedad, que condujo a errores en ambos lados de la pista. Pusieron todo lo que tenían los jugadores visitantes, que paliaron como pudieron las numerosas bajas, en especial las de los anotadores Bamforth y Clavell. En su ausencia, Noua, al que Pin debería haber dado más minutos en pista por mucho que se revolviera cuando se lo cuestionaron tras el choque, y Griffth fueron los que tiraron del carro. Como muchas veces pasa en estos casos, en precario siempre se cierran filas, se da más de lo que uno tiene., no supone una rendición, ni mucho menos.

RESUMEN

91 - Surne Bilbao Basket (18+28+26+19): Frey (6), Abdur-Rahkman (11), Dragic (14), De Ridder (19) y Hlinason (3) -cinco inicial-; Pantzar (20), Cazalon (3), Rubén Domínguez (2), Gielo (9) y Jones (4).

88 - Covirán Granada (22+24+13+29): Sergi García (12), Silverio (9), Valtonen (3), Noua (13) y Aurrecoechea -cinco inicial-; Rousselle (5), Samuel Griffin (22), Ousmane Ndiaye (8), Bezhanishvili (10), Guerrero (6) y Luca Medal.

Árbitros:
Árbitros: Carlos Peruga, Francisco Araña y David Sánchez. Eliminados por faltas los visitantes Valtonen (m.39) y Rousselle (m.40).

Incidencias: Partido de la jornada 24 de la Liga Endesa disputado en el Bilbao Arena ante 8.026 espectadores. Dato oficial. Antes del partido, e incluido de los actos de su 25 aniversario, el Surne Bilbao tributó un reconocimiento al base francés del Granada Jonathan Rousselle, exjugador y excapitán de los 'hombres de negro'.
 

Los locales se animaron también de cara a las semifinales de la Europe Cup, que abren el miércoles en Francia visitando al Dijon. Un 8-0 inicial, con sendos 2+1 de Rahkman y De Ridder, sumado a lo debilitado que llegó a Bilbao el Granada, parecía apuntar una victoria clara local. Pero no, el conjunto nazarí ni se inmutó con su mal arranque (11-3) y pronto igualó un primer cuarto en el que incluso acabó por delante en los dos últimos minutos (18-22). La racha se llevó hasta el 0-12 contando el amanecer del segundo acto: 18-24.

Noua, Guerrero, Sergi García, que acabó dolido en un tobillo, y el debutante Griffin impulsaban a los de Pablo Pin hasta la entrada en juego de Pantzar, que repartió juego y vio aro con facilidad para, con la ayuda de Gielo y Frey, lograr que su equipo remontase en ese segundo cuarto que equilibró en el marcador un 6-0 de los de negro (27-27). Respondieron los visitantes (27-32) pero la labor de Pantzar (20 de valoración en los 20 primeros minutos) dio sus frutos para, primero, remontar el marcador (40-39, 42-40) y, después, equilibrar el choque (46-46) al descanso tras dos nuevas ventajas de los de rojo (42-44, 44-46). Poco ritmo. No podía ser que pusiera más energía el cuadro nazarí. Este castigaba los errores locales con puntos fáciles, así que se fueron en 46 a vestuarios, muchísimos. No recibió ni un punto tras pérdida en los 40 minutos, síntoma de lo que vigiló la pelota.

Los técnicos trataban de imponer su ritmo con la zona-press. Un canasta a la vuelta de vestuarios del georgiano-austríaco Bezhanishvili, otro jugador que está reanimando al vicecolisa e hizo buenas migas coincidiendo con otro cinco como Guerrero, puso por última vez por delante al Covirán, que ralentizó mucho el juego, puso agresividad y concentración, y vio cómo el Surne Bilbao, que ordenó las ideas en el descanso y recobró el criterio, se le iba marchando con un 8-2 (56-50) que fue ampliando hasta superar los 10 puntos de ventaja (66-54). Fue abriéndose la distancia en el marcador y la victoria de los de negro comenzó a estar clara al auparse con 16 puntos arriba (72-56) poco ante de que finalizase el tercer cuarto también con una buena ventaja (72-59). Todo parecía decidido con un 8 de 11 en tiros de dos en el tercer acto, pero con este Surne amante de las grandes emociones es mucho decir.

Pues tampoco se confirmó esa segunda impresión de que iba a ganar el conjunto vizcaíno, ya que volvió a reaccionar el conjunto nazarí y hasta se puso a tiro de remontada con Valtonen, un tres titular que debería dar más, y Griffin, que cuajó un gran debut. Pusieron a los de Pin por dos veces a tres puntos. Ahí volvió a aparecer Pantzar, y también De Ridder y Dragic. Fuera sustos. Esta gente es profesional en lo de ser uno de los mejores 16 como no deja de repetir su entrenador. No falla, misión cumplida.

Homaneje a Rosselle por los 25 años del Bilbao Basket,. en donde permaneció tres años
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Homaneje a Rosselle por los 25 años del Bilbao Basket,. en donde permaneció tres añosAIOLDiarioAS

Ponsarnau, feliz a medias

Ponsarnau destacó que el triunfo “es una victoria muy importante para seguir” en la Liga Endesa. “El contexto es muy exigente, el presupuesto de los equipos que luchan con nosotros cada vez es más alto y es muy duro ser uno de los 16 mejores”, destacó el técnico de los ‘hombres de negro’ después de asegurar que acabó “contento” a pesar de haberse sentido “enfadado con muchas cosas” durante el encuentro.

Lamentó que hubo jugadores a los que “lo que pasaba en el partido les ha hecho perder el foco” y “eso está mal”, aunque otros “lo han hecho muy bien y por eso hemos ganado un partido muy difícil”. “Este grupo trabaja muy bien y su compromiso es altísimo, aunque hoy unos no han sabido llevar la frustración, otros sí y han sabido darnos ese temple y esa calidad para darnos una victoria importante”, incidió.

Cuestionado sobre si esa frustración pueda verse aumentada en jugadores que están perdiendo protagonismo en las últimas semanas, como Kullamae o Rabaseda que hoy ni siquiera han salido a la pista, el técnico fue contundente. “Lo que está claro es que juntos tenemos que ir a jugar el siguiente partido, luego otro y luego otro. El que no quiera estar junto a todo esto, pues fuera. No contemplamos la opción de que nos pueda ayudar alguien si no está preparado para ayudarnos”, recalcó.

“Hago lo posible para manejar una plantilla de 14 jugadores e intento, desde el respeto, aprovechar a todo el mundo. ¿Que me gustaría que todo el mundo tuviese oportunidades?. Sí, pero tengo una responsabilidad más importante y quiero ser honesto y hacer todo lo posible para ganar partidos”, zanjó.

Pin: “El equipo está frustrado”

Pablo Pin admitió, tras la derrota que su equipo “está frustrado” por los malos resultados que le mantienen en zona de descenso en la Liga Endesa, pero que él en cambio está “muy orgulloso” de sus jugadores. “Entiendo que la gente ve las victorias y las derrotas, pero yo como entrenador veo más cosas y pase lo que pase estoy muy orgulloso. Es un equipo supertrabajador y superluchador. En el vestuario me he encontrado con caras tristes, alguna lágrima, pero queda mucho por jugar y vamos a pelear hasta el último día”, subrayó el técnico granadino.

Pin, por otro lado, reconoció que el Surne Bilbao fue “justo vencedor” de un partido en el que trató de gestionar los minutos de Noua y en el que echó en falta “un poco más” de aportación de un Valtonen que se cargó rápidamente de faltas personales.

“Amine lleva tantos minutos que queríamos que tuviera energía si había un final igualado. Tenemos que cuidarlo y esta semana lo hemos tenido que sacar de algún entrenamiento. Y a Elías lo hemos sentado por sus propias faltas. Confiamos mucho en él, pero con esa intensidad que pone a veces nos vemos lastrados y nos faltan minutos suyos”, lamentó.

En cuanto a la pelea por la permanencia, el técnico del Granada aseguró que el Surne Bilbao, que con este resultado aventaja al equipo andaluz en tres victorias más el ‘average’ particular, “no va a tener ningún problema en salvarse”. “A veces es fácil normalizar a equipos como Bilbao, que se mantiene todos los años con solvencia y además juega en Europa. Y eso es muy difícil. Le veo con mucha solidez”, destacó.

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